Tegucigalpa, Honduras.- La prensa hondureña se viste de luto, al registrar el asesinato del comunicador social, Gabriel Hernández, en horas del mediodía de este domingo, cuando regresaba a su vivienda en Nacaome, departamento de Valle.
Hernández era director del programa “El pueblo habla” transmitido por Canal 25 Valle tv, en la zona sur de Honduras, donde se existe una fuerte y permanente oposición a la línea gubernamental del régimen de Juan Hernández, y las empresas extractivistas.
El departamento de Valle es parte de la “ruta del sur” expuesta ante el mundo desde la vista de empresarios transnacionales que explotan los bienes comunes de la naturaleza (ríos, playas, peces, metales preciosos, hasta la energía fotovoltaica y eólica) y para lo que se ha creado el programa estatal “la hora del sur”, desde el 2015.
Estos temas conforman la agenda informativa de los pocos espacios -en su mayoría- independientes y comunitarios, causasando criminalización a periodistas y comunicadores sociales que denuncian violaciones a derechos humanos.
Entre los casos de criminalización del derecho a la libertad de expresión han sido contra integrantes de la Asociación por el Desarrollo de la Península de Zacate Grande (ADEPZA) y su radio comunitaria “La Voz de Zacate Grande”, en Amapala, Valle.
De igual forma, la condena contra Ariel D’Vicente, luego de una querella presentada por denunciar actos de corrupción de parte de un comisionado de policía (años después el Ministerio Público confirmó estos hechos, y ahora Lorgio Tinoco es prófugo de la justicia).
Se suma Jairo López, periodista de Choluteca, está bajo medidas sustitutivas a la prisión, por supuestas denuncias que afectan a la estatal Empresa de Energía Honduras (EEH); y, Melissa Hernández, a quién la policía lanzó bombas lacrimógenas cuando denunciaba agresiones después de una protesta social convocada por el grupo de oposición “Bastión del Sur”.
Tambien Neptalí Rubí, periodistas de Nacaome y cercano en la labor informativa con Gabriel Hernández, ha sido víctima de amenazas, golpizas y detenciones por parte de militares cuando daba cobertura a protestas contra el fraude electoral en diciembre del 2017.
El programa televisivo de Gabriel Hernández era crítico al acontecer del país, denunciaba lo que sucedía y exigía justicia por las y los compañeros caídos por sus ideales, lamentamos que este hecho se dé en esta zona, por lo que exigimos que no quede en la impunidad, expresaron integrantes de la Red de Defensores y Defensoras de Derechos Humanos de la zona Sur de Honduras (REDEHSUR).
Según información preliminar, el periodista estudiaba en la Universidad Cristiana Evangélica Nuevo Milenio (UCENM), saliendo se clases se dirigía a tomar tomar el transporte público para su casa, cuando un individuo a bordo de una bicicleta le infirió seis disparos, que acabaron con su vida.
Al instante fue auxiliado por otras personas, y a aborto de una vehículo pick-up, lo trasladaron a un centro hospitalario, probablemente ya sin vida.
El Comité por la Libre Expresión (C-Libre) registra al menos 70 asesinatos contra periodistas, comunicadores sociales y empleados de medios de comunicación, desde el año 2003 a la fecha. De los que, el 90 por ciento de casos en la impunidad, y que sitúa a Honduras en unos de los países más peligrosos para ejercer el periodismo.
Gabriel Hernández era un combativo periodista que acompañó el trabajo de la Alianza de Oposición Contra la Dictadura (para sacar del poder a Juan Hernández), y siempre estuvo del lado de las luchas sociales con sus medios de comunicación, televisivo y redes sociales, detalló un comunicador social con quién compartió faenas.
El periodista Gabriel Hernández afín al partido Libertad y Refundación (LIBRE), mantenía una postura crítica social contra el sistema gubernamental en general.