Tegucigalpa, Honduras.- Elementos de la Policía Militar del Orden Público (PMOP), mantienen vigilado el entorno de la Morgue Judicial del Ministerio Público, donde se tiene previsto este día el retiro del cuerpo de Keyla Patricia Martínez Rodríguez, quien perdió la vida bajo custodia policial en La Esperanza, Intibucá.
Desde las 7 de la mañana de este martes 9 de febrero, llegó la familia de la estudiante de enfermería, para retirar su cuerpo, sin descartar el proceso de una segunda autopsia (de carácter privada) y los actos fúnebres que serán en su pueblo natal, según trascendió.
Sin embargo, los elementos de las fuerzas represoras se pasean por las instalaciones de la Morgue Judicial de Tegucigalpa con sus armas y demás equipo anti motín, grabando con sus teléfonos móviles a las personas que están a la espera de la entrega del cuerpo.
Ayer se dio una fuerte represión por elementos de la Policía Nacional en la ciudad de La Esperanza, Intibucá, donde cientos de personas protestaron frente la sede policial de la Unidad Departamental de Policía #10, dejando varias personas heridas, golpeadas y detenidas, informó el líder social Salvador Zúniga.
Keyla Martínez, era una joven de 26 años, que la noche del sábado 6 de febrero fue llevada a las celdas policiales de La Esperanza, ciudad de donde era originaria y que está ubicada a 180 kilómetros al occidente de Tegucigalpa (donde estudiaba). En horas de la madrugada del domingo fue trasladada por una patrulla policial al Hospital local “Enrique Aguilar Cerrato”, supuestamente porque la encontraron en un intento suicida.
El Hospital emitió un comunicado afirmando que la joven llegó con signos vitales ausente y su estado era de «fallecida». Contrario al comunicado de la Secretaria de Seguridad que afirma la joven falleció en el centro asistencial.
La autopsia revelará si hay lesiones en el cuerpo de la universitaria Keyla Patricia Martínez Rodríguez, y podría indicar la causa de su muerte suscitada en la celda del UDEP #10, donde la policía informó que se estaría asfixiando con una camisa sujeta a los barrotes de la bartolina.
La familia afirma que Martínez Rodríguez no sería de las personas que toma la decisión de quitarse la vida. Además que no recibieron ninguna llamada telefónica para saber que la joven estaba detenida en la posta de La Esperanza, lo que es un derecho de toda persona privada de libertad.
Esta tarde llega a Honduras procedente de España, doña Norma Rodríguez, madre de Keyla, para despedir a su hija y exigir justicia.
