Por Riccy Ponce
Siguatepeque, Comayagua.- Este viernes 4 de abril a eso de las 11:00 de la mañana, en el Tribunal de Sentencias de la ciudad de Siguatepeque, Comayagua, se le dio lectura a la sentencia por el asesinato de Mario Sequeira Canales, ocurrido en el año 2010, dentro de una celda de la Policía Nacional en esta ciudad, después de ser detenido.
A ocho años del atroz crimen de Sequeira, los culpables fueron absueltos, aun cuando los familiares de la víctima indicaron que las pruebas presentadas eran claras y todo los acusaba.
Los policías que fueron absueltos son Nasir López (jefe de la posta policial donde se cometió el asesinato), Edwin del Cid y Alfredo Pérez López, por los delitos de homicidio simple, torturas, falta de los deberes a los funcionarios públicos y abuso de autoridad. Condenando a los policías Carlos Francisco Verde, Mónico Aguirre y Carlos Palma Turcios, por los delitos de vejámenes.
Después de escuchar la lectura de la sentencia, Karol Cárdenas, del Área de Acceso a la Justicia del COFADEH, quien se constituyó como acusador privado de la familia Sequeira, expresó que es aberrante la decisión por parte del Tribunal de Sentencias, al absolver a los hoy imputados, argumentando que no se individualizó la participación de los imputados.
A los otros tres acusados los sentencia solo por los delitos de vejámenes, misma que es contradictoria, porque como sí puede reconocer los vejámenes y no el homicidio y las torturas de las cuales fue víctima Mario Sequeira, dijo cárdenas a defensoresenlinea.com.
Cárdenas, quien no conforme con la sentencia, anunció que presentará un recurso de casación, el cual se interpondrá en un plazo de 20 días a partir del lunes 07 de mayo de 2018.
Por su parte Javier Sequeira, hermano de la víctima, expresó que sienten impotencia porque después de que todo los acusaba, quedan en libertad.
“Imagínese después de tener todas las pruebas en contra de ellos, esa es la justicia que tenemos en este país, los dejan libres cuando todo estaba en contra de ellos, que justicia puede haber en Honduras. Pensamos nosotros con COFADEH ir a la Corte Suprema de Justicia, pero ahorita en este juzgado de Siguatepeque estamos en total impunidad”.
Maribel Sequeira, hermana de Mario, dijo que dejando en libertad a los culpables es como que volvieran a matar a su hermano.
“Realmente nos sentimos indignados, trises, esperábamos una resolución favorable porque tenemos ocho años de estar en esta lucha, y mi hermano está muerto, para ellos eso no es nada; estamos realmente indignados, con eso para ellos un asesinato es nada, quedaron libre como si no hubiese cometido ningún delito, y nosotros seguimos visitando a mi hermano en el cementerio. Hay testigos que dicen que ellos fueron los responsables del delito y no hay justicia”.
Mario Sequeira Canales recién había ingresado a la ciudad de Siguatepeque en los últimos días de mayo del año 2010 procedente de Estados Unidos, de donde salió para pasar una temporada corta con sus familiares residentes en esta ciudad. Sequeira Canales jamás imaginó que la muerte le esperaría en su ciudad natal.
Después de registrarse en el hotel para festejar ingirió algunas bebidas alcohólicas, fue denunciado por el gerente para que lo detuvieran por escándalo público, pero al resistirse fue golpeado y trasladado hasta la posta policial donde lo continuaron golpeando hasta causarle la muerte. Cuando ya no respiraba lo sacaron de la celda y lo trasladaron en la paila de la patrulla hasta una clínica, donde se comprobó que ya estaba muerto por lo que el doctor no lo quiso ingresar, debido al estado en el que se encontraba.
Al día siguiente los familiares fueron a ver como se encontraba y a ver la hora de salida, a lo que le dijeron que Sequeira Canales, nunca había estado allí, aun cuando uno de sus hermanos vio como lo trasladaban en la patrulla.
Para saber más y el porqué fue detenido se fue a la posta y escuchó los gritos desde afuera, pero él pensó que era producto del estado de ebriedad en el que se encontraba y que al día siguiente saldría, pero jamás se imaginó que en ese momento su hermano estaba siendo torturado por los elementos policiales dentro de la celda y que ya no lo vería con vida.
