Comunicado
Nosotras y nosotros, la familia de Keyla Patricia Martínez Rodríguez, víctima de homicidio ejecutado por agentes de la Policía Nacional, asignados a la Unidad Departamental de Policía #10 (UDEP #10) de la Esperanza, Intibucá, tras su captura la noche entre el 6 y 7 de febrero de 2021, a la comunidad nacional e internacional comunicamos lo siguiente:
Nos personamos ante el Ministerio Público a presentar la revocatoria del poder pleno otorgado a la abogada Irma Yamileth López Álvarez, a quien públicamente le manifestamos nuestro agradecimiento. E informamos nuestra decisión de trasladar Poder Legal sobre el caso de Keyla Patricia Martínez Rodríguez, a organizaciones Defensoras de Derechos Humanos, especialmente al Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH).
Al mismo tiempo, estamos denunciando actos de hostilidad en contra de nuestra familia como ser la presencia de personas extrañas en horas de la noche en la tumba de Keyla Patricia Martínez Rodríguez, ubicada en el Cementerio Municipal de La Esperanza, Intibucá.
El cementerio cierra sus puertas a las 6:30 p.m. y a esas personas se les ha visto alrededor de las 8:00 p.m. según una denuncia que consta en la municipalidad de La Esperanza. Esta acción causa temor, al recordar el caso del menor Eblin Noel Corea Maradiaga, manifestante de 17 años, asesinado por militares durante una represión en Yarumela, departamento de La Paz, en junio de 2019. La familia Corea se vio obligada a vigilar día y noche su tumba, por temor a que profanaran el cuerpo, hasta que se le practicó la exhumación y debida autopsia para extraer el proyectil, que coincidió con el arma del militar enjuiciado hace unas semanas. En el caso de Keyla Patricia Martínez Rodríguez, la autopsia reveló que la causa de muerte es homicidio por obstrucción de vías respiratorias, contradiciendo la versión policial que afirmó un suicidio, cuando Keyla estaba bajo su custodia en calidad de detenida, supuestamente por infringir el toque de queda según el Decreto Ejecutivo PCM 012-2021.
Como familia que hemos denunciado el crimen contra Keyla Patricia Martínez Rodríguez, somos víctimas de constante vigilancia, persecución, hostigamiento e intimidación de parte de fuerzas represoras del Estado. Hay patrullas policiales que merodean nuestras casas y a los lugares que hemos frecuentado. Hacer fuertes ruidos cuando estamos en casa, como advirtiéndonos de su presencia. Se escucha que cargan sus fusiles, hace unos días, una mujer vestida de civil y armada con un fusil en compañía de varios miembros uniformados de la policía nacional hacía movimientos con su arma, cerca de nosotros.
Entonces nos preguntamos ¿Esto es hostilidad o seguridad?
Y aunque existe temor en la familia por este contexto que enfrentamos:
ADVERTIMOS que no dejaremos de buscar JUSTICIA.
EXIGIMOS que los criminales paguen por los hechos contra Keyla Patricia Martínez Rodríguez.
INSTAMOS al Ministerio Público que realice su labor de manera objetiva, pronta y diligente.
AGRADECEMOS a quienes nos acompañan en este camino que no es fácil, pero es el correcto, a fin de que el crimen contra Keyla Patricia Martínez Rodríguez, no sea una estadística más que abone a la impunidad en Honduras.
Tegucigalpa, MDC, 23 de febrero de 2021