RESCATEMOS LA ESPERANZA

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La coyuntura actual de Honduras jalonea hacia la oscuridad construida por las mentes criminales del Cartel de Lempira que nació en el Liceo Militar del Norte en 1980, cuando el Sisimite y sus amigos tenían 12 años.

Pero esta noche es un deber ético, además es bueno para la salud mental del pueblo hondureño, no ocuparnos de las tinieblas cuyo propósito es introducir la estrategia macabra del shock paralizante que da oxígeno al diablo que desgobierna.

Hoy vamos a ocuparnos de la luz y de la esperanza que encontramos en las palabras del sacerdote Florentino Hernández, en El Triunfo, Choluteca, donde sirve a su pueblo desde hace 3 años.

En diálogo con la coordinadora del Cofadeh, Bertha Oliva, este guía espiritual católico, defensor potente del derecho al medio ambiente sano, habló de la neutralidad política en situaciones de conflicto. Y del amor en tiempos de presión y represión.

La fotografía de ese diálogo profundo entre una mujer del estado seglar, defensora de la vida,  y un clérigo diocesano, defensor del territorio sin minas a cielo abierto, fue tomada por el periodista Giorgio Trucchi de la Rel UITA, durante una gira compartida esta semana a través del sur de Honduras.

En la imagen tomada en el gran corredor interior de la Casa Cural se observan tres sillas rústicas de madera, en una de las cuales el cura obediente del pueblo empobrecido está sentado en posición relajada, viste una camisa blanca con detalles bordados, y habla con confianza. Enfrente suyo, en bluejeans, Bertha escucha atenta su relato.

Y aquí está el momento esperanzador que nos importa rescatar esta noche. El líder espiritual, que está asediado por su propio superior el obispo canadiense Guido Charboneau, quien a su vez está bajo presión de la Asociación de Mineros que es empujada por el Partido Nacional, el cual responde al Crimen organizado internacional, toma la palabra y dice:

“Ellos me piden neutralidad -en medio del conflicto que se genera entre las empresas mineras que entran a la fuerza y el pueblo del Triunfo que se opone rotundamente a la explotación dentro de sus territorios-, pero eso no va conmigo. Porque cuando se compromete la vida de casi 70 mil personas, usted no puede ser neutral”.

Al escuchar esta posición cristalina, honesta, ética y valiente de un subordinado dentro de una institución jerárquica como es la vieja iglesia católica, que se asemeja al viejo esquema de un ejército, no queda más que inclinar el sombrero en señal de reverencia, de admiración y respeto.

En ese instante Bertha Oliva pensó en Romero el santo de América y por su memoria pasó también la famosa frase del pacifista sudafricano, el arzobispo de la ciudad del Cabo, Desmond Tutu, cuando visitó Honduras a comienzos de la década del 90: “Si eres neutral en situaciones de injusticia, has elegido el lado del opresor.”

Si una persona miente al definirse apolítica para no asumir posición en una situación de conflicto de poder, si usted que nos escucha repite con frecuencia que no se mete en nada cuando está metida hasta el cuello, permítanos recordarle la frase del obispo Tutu, que es la misma del padre Florentino:

“Si eres neutral en situaciones de injusticia, has elegido el lado del opresor.”

Sin lugar a dudas cuando la injusticia y la brutalidad gobiernan del lado de los corruptos, narcos y explotadores, tener la razón es altamente peligroso. Y de ese riesgo conversó la Rel Uita con el Cofadeh delante del párroco del Triunfo, para no estar de lado de los malandros.

Ninguna de estas dos organizaciones tiene ni un ejército privado para defender por la vía armada las mil hectáreas en disputa dentro del territorio del Triunfo, ni un equipo de gorilas para garantizar la protección de la integridad física del sacerdote.

Pero ambas organizaciones tienen la palabra para decirle al clero católico de Québec, que históricamente ha gobernado la iglesia del sur, que asuma su compromiso de triple ministerio teológico, social y profético. Y que paren de hostigar a Florentino, que tiene tareas pendientes con su pueblo que le respeta, le ama y le sigue. Un traslado a otra zzona es una censura directa. Una capitulación frente a la dictadura que quiere todo el sur para sus ZEDES.

El derecho a las inversiones privadas existe y el derecho al empleo también, es cierto, pero en este punto el valiente religioso del púlpito que ama las visitas pastorales a través de 130 comunidades del sur, dice con propiedad:

“Las tierras concesionadas del Triunfo son de vocación agroforestal, es decir, son para producir ciruelas, melones, sandías, camarones, mangle, maíz y maicillo. Aquí la gente es agricultora, lo que significa que no van a cambiar su forma de vida para ser empleados de las minas, que realmente no producen puestos masivos de trabajo” como les gusta repetir hasta el cansancio.

Florentino está bajo presión jerárquica, en la mira perversa de los malandrines, que son los mismos que están cazando testigos en las prisiones, silenciando estudiantes críticos y profesores valientes por todo el país. Pero Florentino está envuelto por una conciencia colectiva limpia y legítima, que lo protege.

Este celo bravío del pueblo triunfal del sur es nuestro ejemplo a nivel nacional. Por eso, esta noche les abrazamos con admiración y amor, a todos los hombres y mujeres, jóvenes y niños, que cuidan la libertad y la vida de Florentino y de su territorio, como dones preciosos del gran Universo.

Muchas gracias, hermanas, hermanos!

Editorial Voces contra El Olvido, sábado 2 de octubre 2019