Tegucigalpa.
Con el objetivo de no quedar mal ante la comunidad internacionalmente y nacional, el Gobierno está judicializando a los protestantes con delitos comunes para que las cárceles no estén llenas de presos políticos, sino que de delincuentes.
Así lo ha manifestado Lenin José Guevara Hernández, un protestante de Comayagua que permaneció siete días preso en La Granja Penal de esa ciudad, luego que fuera capturado por miembros de la Policía Nacional y Policía Militar durante una protesta en el kilómetro 93 en la carretera CA-5, a la altura de la Cuesta de La Virgen, entre Comayagua y Siguatepeque, zona central del país.
“Hemos estados muy activos en las protestas y el día 26 de enero de 2018 nosotros fuimos capturados por la Policía Nacional y miembros de la Policía Militar, y la DPI (Dirección Policial de Investigación) nos sindicó tres delitos, pero la fiscalía desechó un delito y nos acusó solo en dos”, expresó a defensoresenlinea.com Guevara Hernández.
En un principio Guevara Hernández había sido acusado por los delitos de robo agravado, intento de incendio y asociación ilícita, pero la fiscalía al presentar el requerimiento solamente los acusó de robo agravado e intento de incendio, desechando el delito de asociación ilícita.
Guevara Hernández fue detenido como a eso de las 11:30 de la noche y en horas de la madrugada la policía detuvo a tres personas más, a quien también acusó de los mismos delitos.
“Nosotros no nos conocíamos entre los que fuimos capturados. Yo fui atrapado a las 11:30 de la noche y los compañeros con los cuales estuve preso fueron atrapados a la 1:30 de la mañana, no andábamos juntos”, señaló el entrevistado.
Las cuatro personas fueron trasladadas a la Granja Penal de Comayagua donde permanecieron recluidos siete días, cobrando su libertad luego que en audiencia el juez les decretara sobreseimiento definitivo por el delito de intento de incendio y provisional por el de robo agravado.
“Es lógico que alguien que intenta robar una rastra no se va a robar un celular, alguien que se va robar una rastra se roba la carga. Y además nunca llegó el testigo, nunca llegó la persona que fue dañada, nunca llegó al juicio. Yo en estos momentos dudo de esa denuncia administrativa que puso algún rastrero porque nunca llegó a decir que nosotros éramos, ni llegó a reclamar su dinero y su celular que dice que perdió”, expresó Guevara Hernández.
Asimismo señaló que cuando leyó el fallo se encontró con la sorpresa que le dan sobreseimiento definitivo por el intento de quema y sobreseimiento provisional por el robo, lo que considera una contradicción lógica, porque “no se encontró un testigo que dijera que yo era sindicado o que yo era la persona que atentó contra la rastra y tampoco el rastrero llegó a decir que yo era la persona que atracó la rastra”.
Indicó que con esa medida otorgada a luces se entiende que están intentando frenar, atemorizar o intentar que “nosotros no sigamos yendo a las protestas”.
Guevara Hernández lamentó que es triste que el sistema de justicia nacional pueda mencionar a personas que andan amparados en el artículo 3 de la Constitución haciendo y ejerciendo su derecho a protestar y a estar en insurrección, y que sean sindicados por actos que no cometieron.
Asimismo denunció que los protestantes que son detenidos durante las manifestaciones o en allanamientos ilegales, porque no presentan ninguna orden judicial, están siendo acusados por delitos comunes para no quedar mal con la comunidad internacional y nacional de que las cárceles están llenas de presos políticos, sino que de delincuentes.
“Las baterías están enfiladas en función de judicializar no de sedición, no como un instrumento político, sino que tratan de ver al protestante como delincuente y se le añaden cargos que no son necesariamente cargos políticos, sino más bien cargos de delitos comunes para qué, para que el estado no tenga cárceles llenas de presos políticos, sino cárceles llenas de delincuentes, y así ante la opinión internacional y nacional decir que se está judicializando a delincuentes y no a protestantes”.
Es del criterio que es normal que alguien que tiene ideas dictatoriales use la represión y la fuerza para poner sobre cualquier otra idea su opinión personal.
“Una fuerza empujada por las armas no respeta leyes, no respeta acuerdos y no respeta la soberanía popular y pienso que es lógico que usen su único argumento que es la imposición de la fuerza, las armas en contra del pueblo”.
Proceso de Transformación
En la década de los 80 hubo desaparecidos, hubo muertos políticos y eran muy poquitos los que andaban que el proceso de transformación del país podrían darse, recordó Guevara Hernández.
También señaló que después de los acuerdos de paz de Esquipulas I y II ya pudimos tener en este país un partido que representara la izquierda y que para el 2009 ya éramos un tercio de la población que considera que este país necesita y amerita cambios estructurales y transformaciones, que verdaderamente garantice la igualdad, la educación, la salud, la vivienda a todos y cada uno de los hondureños, distintamente de la capacidad económica que deban tener.
“Hoy por hoy creo que es una bola de nieve, es una avalancha, no solo porque haya mil judicializados y criminalizados, no porque hayamos estados unos cuantos presos y no porque tengamos 40 mártires, esto no se va a detener”, sostuvo Guevara Hernández.
Asimismo señaló que los procesos de transformación y desarrollo social, y de gente que encamina sus pasos hacia un país mejor, no se van a detener porque es una lucha que tiene muchos años, que tiene muchos caídos y que va creciendo la lucha, porque hoy la mayoría de la población quiere que este país cambie.