Por Sandra Rodríguez
Tegucigalpa, Honduras. – Esta mañana la policía nacional nuevamente utilizó sus armas para disuadir una manifestación en el marco del noveno aniversario del golpe de Estado político-militar-empresarial en Honduras, que sacó del poder a José Manuel Zelaya Rosales el 28 de junio del 2009.
En la conmemoración de los nueve años de dictadura, un grupo de jóvenes se reunió en la Plaza Cuba, en Tegucigalpa, para pronunciarse contra la opresión y falta de gobernabilidad en el país, pero la reunión terminó con gases lacrimógenos, toletazos y pedradas, que afectó a varios de los manifestantes.
Dos de ellos acudieron a interponer la denuncia al Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras, COFADEH, ya que no están dispuestos a seguir con los atropellos a la libertad de reunión y manifestación pública, expresaron.
“Después de entonar el Himno Nacional, decidieron tomarse un carril del redondel que conecta el bulevar Fuerzas Armadas con el bulevar Centroamérica, luego llegó un contingente policial, que salió de las instalaciones de la Dirección Nacional de Transito, y nos empezaron a lanzar gas pimienta para disuadirnos”, narraron los jóvenes.
Otro indecente que unos hombres a bordo de un carro de la Empresa Energía Honduras (EEH), atropelló a uno de los manifestantes, quien quedó bajo el automotor. Al menos tres hombres estaban dentro y que iba en la cabina trasera del vehículo lanzó una patada contra el vidrio de la ventana y lo quebró, ocasionando heridas en mi mano derecha de dos muchachos.
Eran más de 20 policías dando persecución a los y las manifestantes, quienes corrieron atravesando algunas zonas residenciales hasta llegar a la oficina del Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (CONADEH), donde denunciaron y les recomendaron ir a medicina forense.
Varios de los y las manifestase perteneces al Movimiento de Juventus en Resistencia, y han realizado otras acciones de protestas sociales en el contexto nacional y político del país. Y hoy no podían quedarse con los brazos cruzados, ya que el país sigue en golpe de Estado, denunciaron los agredidos.
En el marco del golpe de Estado del 2009 el COFADEH registro 54 asesinatos políticos y al menos 13 detenidos desaparecidos. Mientras que, la Comisión de Verdad, publicó un informe basado en dos mil testimonios de familiares y víctimas de violaciones a los derechos humanos durante la ruptura constitucional del país, que dejó al presidente de facto Roberto Micheletti Bain, hasta enero del 2010 cuando tomó poder el nacionalista Porfirio Lobo Sosa, sucedido por su correligionario Juan Orlando Hernández, que actualmente gobierna ilegalmente, tras reelegirse con un fraude electoral del 26 de noviembre del 2017.
Los jóvenes denunciantes también han protestado por este fraude que alarga la dictadura en el país.
