Tegucigalpa, Honduras.- Cinco estudiantes y un guardia de seguridad del instituto José Trinidad Reyes (JTR), de San Pedro Sula, fueron capturados tras una irrupción policial en el centro educativo, este jueves 18 de julio.
Por seguridad, los estudiantes omiten su nombre para denunciar el ataque perpetrado por agentes de la Policía Nacional y de la Unidad de Toma Integral Gubernamental de Respuesta Especial de Seguridad (TIGRES), quienes a las cuatro de la tarde entraron al colegio de educación media disparando bombas lacrimógenas, persiguiendo y golpeando a los jóvenes.
Algunos videos que circularon a través de redes sociales, muestran la cacería humana de los policías contra los y las estudiantes, en su mayoría menores de edad, que no sabían lo que sucedía.
Cabe señalar que esta semana es de exámenes en la institución pública, por lo que al momento del ataque, varios grupos estaban en los salones realizando sus evaluaciones académicas y salieron a los pasillos para evitar la asfixia.
«Lo mató, lo mató» se escucha en uno de los videos grabados durante la represión. El caso describía una golpiza de parte de uno de los hombres armados contra algún estudiante envuelto en gas lacrimógeno.
Entre las personas detenidas hay dos menores de edad que responden a los nombres de Angie Grissel Bonilla Hernández (16) y José David Morales Gosselin (17); Además Rodiney Zelaya Quintana y Víctor Fernando Trujillo Murillo ambos de 18 años, y Yeison Ariel Almendares (19). Al grupo suma el guardia de seguridad interna del JTR, Mario Roberto Sánchez (34), acusados por los delitos de Daños y Atentado en perjuicio del Estado de Honduras.
El Movimiento Amplio por la Dignidad y la Justicia (MADJ), presentó un recurso de Habeas Corpus en favor de las seis víctimas de la represión policial, el cual no ha sido resuelto por las autoridades correspondientes, según información brindada por la organización defensora de derechos humanos al Defensores en Línea, esta noche.
Hay un grupo de abogados y defensores de derechos humanos pendientes de la situación de la y los estudiantes, así como de Sánchez Cruz, quienes fueron remitidos a la Primera Estación de Policía de San Pedro Sula, departamento de Cortés, al norte del país.
Unos seis abogados están reuniendo los medios de prueba para la defensa y liberación de los jóvenes, y para mañana se lanzó una convocatoria a docentes, trabajadores de la medicina, padres y madres de familia, estudiantes y ciudadanía en general, a apostarse frente al centro de detención y exigir su liberación, informó a través de redes sociales el periodista y defensor de derechos humanos, Bartolo Fuentes.
La situación que estamos viviendo es peor que la guerra fría de los años ochenta, denunció el abogado Tomás Andrade, parte del equipo de defensa, en declaraciones a través del canal UNEtv.
Para hoy y mañana viernes 19 de julio, los alumnos de último año habían decidido apoyar la convocatoria de un frente estudiantil y a su vez, el llamado de la Plataforma de lucha por la defensa de la Salud y Educación, sobre acciones de protesta regionales que mantienen desde finales de abril ante las arbitrariedades del régimen de Juan Hernández mediante los decretos Presidenciales en Consejo de Ministros (PCM).
Mientras estaban en la protesta, la policía llegó a reprimirlos y «nos enfrentamos a ellos por que nos empezaron a reprimir» aseguró un estudiante a través del canal de televisión HCH.
Es así, que los estudiantes del José Trinidad Reyes, hicieron un llamado a la doctora Suyapa Figueroa y demás representantes de la Plataforma a que los apoyen en la demanda de justicia y libertad para sus compañeros y compañera, capturados por la policía.
Prácticas dilatorias para liberación
El profesor Jimmy Sorto, miembro de la Plataforma de lucha por la defensa de la Salud y Educación, denunció que las autoridades correspondientes están implementado prácticas dilatorias para que se logre la libertad se los estudiantes y guardia arrestados.
Además confirmó que el llamado de protesta para mañana será en la Primera Estación de Policía, donde esta noche pernoctan padres, madres, maestros y compañeros del instituto José Trinidad Reyes.
El viernes anterior, la Policía Nacional disparó gases lacrimógenos dentro de las instalaciones de la Universidad Pedagógica Nacional «Francisco Morazán» de Tegucigalpa, afectado a niños y niñas de educación pre básica y básica del Centro de Investigación e Innovación Educativa (CIIE).
El CIIE es una escuela adscrita a la universidad pedagógica, y fue atacada cuando la policía pretendía disuadir una protesta pacífica. Las acciones se repitieron el sábado 13 de julio. Tal como sucede con la mayoría de protestas en defensa de la salud y educación.