Tegucigalpa, Honduras.- «Me están tocando, me llevan sin ningún motivo» gritaba la joven universitaria Paola Pineda, quien se enfrentó a más de una docena de policías que tras atacarla, pretendían llevarla presa, este miércoles 12 de junio.
La joven estudiante de la Universidad Pedagógica Nacional «Francisco Morazán» no se dejó someter a la importancia, como lo pretendían hombres y mujeres armadas que disuadian la manifestación este día, frente al aeropuerto Internacional de Toncontín, en Tegucigalpa.
La policía nacional atacó física y verbalmente a la joven, hecho visto ante los medios de comunicación y defensores de derechos humanos. Fueron unos cinco minutos de lucha, Paola no dejó de gritar y oponerse a ser subida a una patrulla, mientras aumentaba el grito popular «suéltenla, suéltenla».
Ya se había notificado la detención de Alejandro José Zepeda (19), y Edy Orlando Zúniga (22), quienes fueron dejados en libertad hora después. El Comité por la Libre Expresión (C-Libre), denunció que había personas detenidas ilegalmente en la entrada de la instalación de la terminal aérea.
Mientras las fuerzas represoras del Estado, dispersaban la manifestación convocada por la Plataforma gremial, que salió del Instituto Central «Vicente Cáceres», aprovecharon para capturar a mansalva a los jóvenes que pasaban o estaban en la zona militarizada.
Paola expresó a través de un video de el programa La Plaza, después de ser liberada y con evidentes golpes físicos, que a ella la atacaron por negarse a subir a la patrulla.
La estudiante se dirigía a un centro comercial en frente de Toncontín, cuando viene la mujer y me agarra del pelo, y el hombre le dijo «llévate esa hijeputa y la golpeas».
¿Y por qué me vas a llevar? Le pregunté.
-Porque yo quiero, me dijo.
Relató la joven, aún con el sobresalto, por lo que le hizo la policía nacional de Honduras, cuyo lema es «servir y proteger».
No he hecho nada, ahí están mis papeles, no soy delincuente, afirmó Paola Pineda, quien logró escapar de los ataques de la policía, pero sentía temor de salir de la zona, por el fuerte cordón policial-militar.
Cabe mencionar que, en este forcejeó, donde la joven buscaba liberarse de que la enchacharan y subieran a la patrulla, la policía golpeó a miembros de la prensa, entre ellos de C-Libre, Une Tv y Notifides.
El director de Notifides, Carlos Ramos, condenó la agresión de parte de la policía, entidad que no está para agredir, sino para mantener orden. Además que el ataque fue contra una dama, en referencia a la periodista Lilian Flores, quien daba cobertura a la movilización social. El periodista, hizo un llamado a la Secretaría de Seguridad, para que no se repitan estos hechos, contra ningún miembro de la prensa.
Así mismo, trascendieron videos donde la policía en la zona sur del país, disparaban bombas lacrimógenas dentro de casas de habitación, y la detención, golpes y torturas contra jóvenes.
A través del canal Metro TV de Choluteca, se informó de la detención y desaparición de varios manifestantes en la ciudad de Choluteca. En este caso, defensores de derechos humanos y maestros se apersonaron a la Dirección Policial de Investigación (DPI), donde a través de Habeas Corpus solicitaran ver a los detenidos.
En este momento (noche) hay una fuerte represión policial contra la protesta social desarrollada en la ciudad de Danlí, al oriente del país.
Integrantes de la Red de Defensores/as de Derechos Humanos y Comunicadores/as Sociales de El Paraíso, denunciaron al Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH), los ataques de fuerzas de represión contra el pueblo que apoya las protestas sociales.
Intimidación contra dirigente magisterial
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En Tegucigalpa se denunció a través de los medios de comunicación que cubrían la protesta, que el secretario general del Colegio de Pedagogos de Honduras (Colpedagogosh), Edwin Hernández, estaba desaparecido.
Compañeras gremialistas declararon que había sido abordado por hombres extraños cerca de Toncontín, y después ya no contestaba su teléfono móvil.
Hernández advirtió en peligro y la persecución de parte de policías, además que desde hace dos semana se ha incrementado la vigilancia en la sede del colegio magisterial, que se ha mantenido firme en su posición como parte de la Plataforma por la defensa de la salud y educación, desde finales de abril.
Esta noche la Plataforma, compartió un comunicado condenando la persecución contra trabajadores de la salud y magisterio, solicitando apoyo con la denuncia a padres y madres de familia y afirmando que no habrá diálogo sin que el régimen atienda sus peticiones.
