Tegucigalpa.- A eso de las 12:00 del mediodía de hoy, familiares de Keila Martínez, joven que murió bajo custodia policial en la Esperanza, Intibucá, retiraron su cuerpo de la Morgue, pero al desconfiar del sistema judicial decidieron realizarle una nueva autopsia de carácter privado, con el fin de esclarecer su muerte.
La joven, quien estaba en el último año de enfermería, fue detenida por elementos de la Policía Nacional de la Esperanza el sábado 6 de febrero, supuestamente por violentar el toque de queda, impuesto con fin de “evitar la propagación del Covid-19”.
En horas de la mañana del domingo fue encontrada sin vida dentro de su celda, y la versión de la policía es que la joven se suicidó con su camisa, cosa en la que sus familiares no creen porque la conocen y saben que sería incapaz de atentar contra su vida, y es por eso que al retirar su cuerpo de la Morgue anunciaron que le realizaran na nueva autopsia, en la que si puedan confiar para posteriormente trasladar el cuerpo a la Esperanza, donde la esperan sus seres queridos para darle el último adiós.
A las instalaciones de Medicina Forense llegaron los familiares, quienes consternados por lo ocurrido, pidieron respeto y anunciaron una conferencia para responder las preguntas de la prensa.
«Les pedimos que respeten nuestro dolor en su momento nosotros realizaremos una conferencia de prensa con las hermanas y la madre, donde estarán presentes ustedes. Les pedimos respeto cuando saquen el cuerpo de mi prima, ya que en su momento realizaremos la conferencia para responder todas sus preguntas y aclarar alguna situación. Hasta el momento no tenemos el dictamen de Medicina Forense, estamos esperando los dictámenes, así que nosotros les pedimos también que no especulemos, expresó Lilith Cálix, prima de Keyla Patricia.
Asimismo, docentes de la facultad de enfermería de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) llegaron a las instalaciones de Medicina Forense para manifestar su apoyo y repudio por la muerte de Keila en manos de la policía.
Una de las docentes describió a Keyla «como una persona aplicada, alegre, una persona que dejó huellas en cada uno de nosotros; nosotros lo que tenemos es dolor e impotencia ya que como mujeres estamos marcadas».
«El Estado no nos está protegiendo y lo único que puedo decir es que estamos de luto, ese luto va a durar para siempre, porque su muerte no fue normal, se le salió al estado de las manos”.
Los hechos ocurrieron en las instalaciones de la Unidad Departamental de Policía #10 en La Esperanza, en donde la joven fue detenida, y, según trascendió, no le brindaron el derecho a realizar una llamada.
En esta misma posta policial se realizaron una serie de protestas para exigir justicia por la muerte de la joven, donde hubo una fuerte represión por elementos de la Policía Nacional a cientos de personas que protestaron frente a la misma estación, donde ocurrieron los hechos por lo que los elementos represores del estado respondieron con una dura represión.
Para el día de hoy se tiene programado un plantón afuera de la facultad de Ciencias Médicas de la UNAH, donde continuaran la exigencia de justicia y que se esclarezca su muerte.
El Cuerpo de la joven de 26 años, luego de realizarle la segunda autopsia, será trasladada hasta la Esperanza para darle cristiana sepultura.
