Tegucigalpa, Honduras.- Los estudiantes del Instituto Central «Vicente Cáceres» (ICVC), esperaban al director departamental de Educación, pero quien llegó fue la policía a reprimirmos, dejando como saldo ocho jóvenes heridos.
A las dos de la tarde de este viernes 26 de julio, inició una toma de las instalaciones ubicadas en Comayagüela, ya que los estudiantes esperaban una reunión con Héctor Napoleón Bonilla, director departamental, donde tratarían un pliego de peticiones para mejorar la infraestructura física y calidad educativa.
Ante el desplante del representante de la Departamental, los estudiantes decidieron iniciar una protesta social, por lo que fueron atacados por la Policía hasta cerca de las seis de la tarde.
El ICVC es una histórica institución, la cual ha sido militarizada, han asesinado a jóvenes de su población estudiantil y en las últimas semanas se ubica entre los colegios reprimidos por la policía nacional, Policía Militar del Orden Público (PMOP) y la unidad Toma Integral Gubernamental de Respuesta Especial de Seguridad (TIGRES).
Existe temor entre los estudiantes para brindar declaraciones, prefieren guardar silencio. Ya no sólo esconden su rostro tras una camiseta o pañuelo, sino su nombre y su voz, ante la persecución, criminalización y estigmatización.
El peligro llega a impactar en su salud, pues los heridos con piedras lanzadas por la policía, algunos de mayor cuidado, fueron seguidos hasta el hospital donde la policia les quería tomar fotos, denunció un centralista.
La calle frente al Central Vicente Cáceres quedó llena de piedras y cartuchos de bombas lacrimógenas lanzadas por la policía ante el portón del colegio. «Dicen que estuvo fuerte, se siente todavía el gas» manifestó un empelado de la institución, que también omitió su nombre.
Mientras que una docente, expresó que los estudiantes mantienen las protestas con unas peticiones que no se las escuchan, y lamentó que los heridos no hayan sido atendidos a tiempo, porque la ambulancia del 911 llegó tarde. No había pasada debido a la represión policial.
Procuradoras de derechos humanos del Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH), que se apersonaron al lugar tras una llamada telefónica, mientras documentan parte de los hechos, fueron atacadas verbalmente por un motorista incómodo, expresando que «ustedes andan defiendiendo a esos vándalos, miren como dejan aquí», entre otras frases, sin detener el vehículo.
Se conoció que uno de los estudiantes fue impactado en su rostro, y que durante la noche continúan en observación médica.