Por: Sandra Rodríguez
Tegucigalpa, Honduras (Defensores en Línea). – Recordando el título de la película hondureña (2003), “No hay tierra sin dueño”, hoy procuradoras del Instituto Nacional Agrario (INA), manifestaron a defensores de la tierra y el terrario que, no hay tierra para los campesinos, ni dinero para comprarlas.
Honduras es un país con leyes e instituciones que deberían ayudar a los y las campesinas en cuanto a la adquisición y producción agrícola. Sin embargo, más de 300 mil familias no tienen acceso a las mismas. “Nosotros ocupamos la tierra para producirla”, detalló el defensor campesino Marco Dubón.
Así como la producción cinematográfica de Sami Kafati, donde está el personaje del alcalde y el terrateniente, en contraste al campesino que no quiere deshacerse de la parcela heredada de generación en generación, la historia se repite cada día en este país que tiene una extensión territorial de 112,492 kilómetros cuadrados con más de ocho millones 500 mil habitantes.
La charla sobre el acceso a la tierra tuvo lugar esta tarde en las instalaciones de La Vía Campesina (LVC-Honduras), donde la procuradora Suyapa Ulloa, habló sobre la situación física y legal de la tierra, si está ociosa, si no está cumpliendo su labor social, y lo establece las leyes y reformas.
La procuradora del INA repitió, al igual que otros empleados de la instrucción, que no hay dinero para comprar tierras, refiriéndose a zonas en recuperación campesina y que se supone son tierras con dueños, sean privados o estatales.
Más de 12 mil hectáreas están en proceso de recuperación, según datos de La Vía Campesina, aunque según defensores del territorio, la cifra se queda corta, porque hay nuevas bases. Solo en el Valle de Sula hay unas 19 mil manzanas de tierra en proceso de recuperación, detalló el defensor Marco Dubón, de la Asociación Nacional de Campesinos de Honduras (ANACH), e integrante de la Red Nacional de Defensores y Defensoras de Derechos Humanos, Tierra y Territorio (RENADETT).
Si los y las campesinas inicien procesos para producir la tierra y que cumpla su labor social, sembrando en su mayoría: frijoles, maíz y arroz, el resultado es que los desalojan violentamente, persiguen, estigmatizan y, hay más de 5,200 personas criminalizadas por el delito de defender el derecho a la tierra, según estimaciones de la Central Nacional de Trabajadores del Campo (CNTC).
El Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH), concertó esta charla, en el marco de la pasantía en derechos humanos que desarrolla esta semana con once integrantes de la RENADETT, cuyas bases campesinas son parte de la CNTC y LVC.
Miriam Sánchez, expresó que la información recibida este día de parte de las procuradoras del INA, será de importancia para lo que puedan enfrentar en la base campesina, especialmente en términos legales y a que instancias recurrir.
Mientras que Dubón, agregó que “al parecer esconden pequeñas informaciones” sobre cosas que se dieron entre 2009 y 20012, en cuanto a resoluciones extendidas a favor de los campesinos. Y como es que se incumple la ley de dar tierras a sobre techo a empresas extranjeras.
La procuradora les explicó que, si una tierra es propiedad del INA, es propiedad privada ¿Pero de quien es el INA? Se preguntó Sergio Godínez. Entonces, como dicen que no hay tierras, si se menciona que hay tierras compradas por el INA, reflexionó el joven, integrante de la RENADETT.
Los pasantes fueron acomáñados por las procuradoras de derechos humanos del COFADEH, Dora Oliva y Meri Agurcia, con quienes han revisado expedientes y tomado denuncias por su accionar en las bases campesinas.