Tegucigalpa.- Al programa radial “Voces contra el Olvido” asistió el sábado 1 de abril, Luciano Hazan, experto del Grupo de Trabajo Sobre Desapariciones Forzadas e Involuntarias de Naciones Unidas, para comentar sobre los alcances de la visita a Honduras.
“Voces contra el Olvido” se transmite por Radio Globo todos los sábados a las 7:00 pm. El espacio radial es una producción del área de divulgación y prensa del Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH)
Inicialmente Luciano Hazan dijo que el trabajo de COFADEH “es central para impulsar el avance de los derechos humanos y los distintos mecanismos de protección”.
Hazan explicó que el Grupo de Trabajo se reunió con representantes de los 3 poderes del estado, la Fiscalía de la República, organizaciones de derechos humanos y familiares de víctimas de desaparición forzada en el país.
“Tuvimos la oportunidad de tener una mirada muy amplia y directa de parte los protagonistas y estamos satisfechos con la información que hemos recogido”, resaltó el experto en derechos humanos.
Tuvimos una amplia oportunidad de conocer la situación sobre desapariciones forzadas con dos temas que nos han impactado, expresó Luciano Hazan.
El primero diría que es la impunidad, nosotros en nuestro informe lo que hemos planteado es que hay una impunidad generalizada. Es decir que con todas las personas, organizaciones, funcionarios, personas individuales y víctimas, quisimos saber sobre avances en materia de respuesta judicial a los casos de desapariciones forzadas que ha habido desde los años 80´s hasta la actualidad, enfatizó.
“No encontramos respuesta, básicamente la respuesta fue que no había avances. Es decir nos hemos encontrado con que no hay condenas, con que no hay rendición de cuentas, pero que tampoco hay procesos en curso que uno puede decir en corto o mediano plazo, que puede haber respuestas”, dijo Hazan.
Luciano Hazan expuso que el Grupo de Trabajo se encontró con una inacción en términos de lucha contra la impunidad bastante notoria. Y que el segundo de los temas que les impactó fue el que tiene que ver con la búsqueda de los seres queridos, reportados como desaparecidos por razones políticas e ideológicas.
“Nos encontramos con una parálisis importante en materia de búsqueda, con pocos resultados, incluso en todos estos años y eso entonces nos parece también un tema que además de impactarnos mucho, nos resulta un tema que requiere las respuestas más urgentes sobre todo para todas las familias que están buscando a sus seres queridos desaparecidos, pero incluso teniendo en cuenta las desapariciones forzadas más antiguas, las ocurridas desde los años 80´s”, resaltó.
Sobre este aspecto, el experto en derechos humanos dijo que el Grupo de Trabajo se enteró que muchos de los familiares de los detenidos desaparecidos han muerto y que otros ya son personas muy mayores.
“Entendemos que este es un tema que requiere de políticas públicas efectivas y que no puede haber dilaciones, que este es el momento para llevarlas adelante”, subrayó.
Hazan destacó que el Grupo de Trabajo encontró un gobierno “muy abierto al tema” en la administración de la presidenta de Xiomara Castro y que todos los funcionarios con los que se reunieron estuvieron muy predispuestos y ávidos a recibir los lineamientos y observaciones.
“Fue una visita muy constructiva y tenemos la expectativa de que la visita sea un punto de partida para que la cooperación y el diálogo con el gobierno pueda continuar y de alguna manera llegar en definitiva al objetivo que se busca, que es encontrar soluciones a los grandes problemas que enfrenta hoy Honduras en esta materia”, destacó.
De acuerdo información de distintas fuentes y documentos analizados, “lo que notamos es que hay ejes centrales en las desapariciones ocurridas en el marco de la doctrina de seguridad nacional (entre 1980-1992) y luego en el marco del golpe de estado y la crisis post electoral de 2017”.
Hazan dijo que han visto una continuidad no tan concentrada en estos hechos pero sí perdurable en el tiempo y con repeticiones alarmantes de personas que desaparecen, sobre todo aquellas que están en situaciones de vulnerabilidad, con bajo acceso a los recursos del estado, con notorias deficiencias de acceso a la justicia y que son casos prácticamente invisibilizados.
El experto detalló que en muchos casos, las denuncias por desapariciones forzadas no son atendidas por los entes policiales o el Ministerio Público, “y entonces ni siquiera hay avances mínimos en las investigaciones”.
“Lo que nos ha preocupado mucho es la situación de temor de los familiares de las víctimas, de las personas desaparecidas. Es decir personas que tienen miedo de denunciar, personas que fueron amenazadas cuando hicieron una primera denuncia y entonces decidieron no impulsar más la búsqueda y las investigaciones penales”, explicó.
Esta situación genera un escenario propicio para la repetición de éstos hechos. Entonces lo que uno puede ver en esta línea de tiempo es que “en definitiva desde los años 80´s hasta hoy, es decir hace 40 años, ha seguido habiendo desapariciones forzadas casi de manera contínua, así como otras violaciones a los derechos humanos como ejecuciones extrajudiciales que en definitiva son asesinatos, torturas y otras graves violaciones, detalló.
“El escenario es muy complejo y muy desafiante. Claramente hace falta voluntad política, porque sin voluntad política es imposible, y no lo hemos visto en ningún lugar del mundo que se pueda avanzar en éstos términos y lo que hace falta es un fuerte impulso por parte de las autoridades judiciales”, subrayó Luciano Hazan.
Luciano Hazan explicó que no hay que olvidar que las desapariciones forzadas como otros delitos de estado tienen casi por definición la impunidad, porque evidentemente las autoridades del estado tienen mucho poder para ocultarlos, para garantizarse impunidad, para ocultar o destruir evidencias y para amenazar a posibles testigos.
“Entonces es muy difícil muchas veces construir la prueba pero la verdad lo que se ha utilizado mucho en este tipo de escenarios y que es una de las herramientas que brinda el derecho internacional de los derechos humanos, y que estamos sugiriendo a Honduras es la responsabilización de los superiores jerárquicos”, resaltó.
Lo que ha funcionado en varios países de Centroamérica ha sido llevar adelante juicios orales y públicos en donde la sociedad pueda ver lo que ocurre, que se lleven adelante las garantías del debido proceso, porque esto además de traer justicia, además va a posibilitar de alguna manera, conocer la verdad, expuso el experto.
“Mientras no haya este tipo de avances, continuaremos viendo nuevas violaciones a los derechos humanos”, advirtió.
El Grupo de Trabajo sobre Desapariciones Forzadas e Involuntarias fue creado en 1980 por el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas y funciona como un canal de comunicación entre los familiares de las víctimas de desaparición forzada y los estados.
En el caso de Honduras, el Grupo de Trabajo ha documentado 210 casos, de los cuales 80 han obtenido respuestas, especialmente de detenidos desaparecidos en forma temporal, aquellas que fueron víctimas de tortura o asesinatos políticos.
Si bien es cierto hay algunas osamentas de personas supuestamente desaparecidas, éstas no han podido ser identificadas porque el estado de Honduras no cuenta con un Banco de Datos Genéticos de los familiares de las víctimas de desaparición forzada. Esta es una recomendación urgente que ha hecho el Grupo de Trabajo de Naciones Unidas a Honduras.
El Grupo de Trabajo sobre Desapariciones Forzadas e Involuntarias presentará un informe final sobre la visita a Honduras en septiembre próximo y lo dará a conocer ante el Consejo de Derechos Humanos con sede en Ginebra, Suiza.
La relatora presidenta, Aua Baldé, en conferencia de prensa dada a conocer el 30 de marzo, al final de la visita a Honduras, expresó que “este es un buen momento para fortalecer la agenda de derechos humanos aquí en Honduras”.
Por otra parte, la voluntad política del gobierno para abordar el tema de las desapariciones forzadas en Honduras debe transformarse en acciones concretas, afirmaron los expertos de la ONU.
“Honduras debe redoblar sus esfuerzos para garantizar los derechos de las víctimas de desapariciones forzadas en los ámbitos de la verdad, la justicia, la reparación y la memoria”, afirmó en un comunicado la delegación.
El Grupo de Trabajo sobre Desapariciones Forzadas e Involuntarias de Naciones Unidas que visitó el país entre el 20 y 30 de marzo de 2023, estuvo conformado por Aua Baldé (Guinea-Bissau), Grażyna Baranowska (Polonia) y Luciano Hazan (Argentina)
