Nadie devuelve la vida de las personas, pero los estados están obligados a brindar explicaciones y reparaciones

0
726
Federico Tatter, Secretario de Relaciones Internacionales de Fedefam

Tegucigalpa.- Honduras, como la mayoría de los países de América Latina, han sufrido en carne propia los crímenes cometidos por el Estado, ya sea desapariciones forzadas o crímenes extra judiciales a hombres y mujeres, que pensaban diferente, que soñaban con una patria grande para las futuras generaciones.

Las familias de las victimas emprenden una lucha por memoria, verdad y justicia, mismas que no son escuchadas, es por eso que muchas ocasiones se recure a la Corte Interamericana de Derechos Humanos para lograr hacer justicia.

Es por eso que, en un hecho sin precedentes, en la ciudad de El Progreso, Yoro, se realizará este lunes 12 de junio el acto público de reconocimiento de responsabilidad internacional, caso Deras García y otros vs Honduras, según ordena la Sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

El caso hace referencia a la ejecución extrajudicial de Herminio Deras García, miembro del Partido Comunista de Honduras y asesor sindical al momento de los hechos, y a la persecución a la que fue sometido Herminio y sus familiares, quienes fueron objeto de amenazas, agresiones, detenciones ilegales y torturas, así como se alegó también la falta de acceso a la justicia, situación que tuvo lugar a partir de 1977.

Por lo que las reacciones de defensores de derechos humanos y familiares de víctimas de estos crímenes atroces no se han hecho esperar. Tal es el caso de Federico Tater de Asunción Paraguay, defensor de derechos humanos y familia de víctima de desaparición forzada, quien dijo a defensoresenlinea.com que “he tomado conocimiento del acto de reconocimiento de la ejecución extrajudicial de Herminio Deras por parte del Estado democrático de Honduras en cumplimiento de sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, quiero dar dos opiniones sobre el carácter de estas sentencias”.

Su primera opinión fue expresar que “nadie devuelve la vida de las personas, pero los estados están obligados a brindar explicaciones y reparaciones, no solamente de carácter temporal si no de carácter permanente, que estén plasmadas en leyes, si es posible en la ley superior que esté en el texto constitucional”.

Añadió “y de carácter permanente, significa que deben trascender los gobiernos, no solamente   ser parte de las disculpas de un gobierno ,si no específicamente de las disculpas de un Estado, o sea que es por una cuestión de supervivencia; el Estado debe dar reparación, debe dar restitución, rehabilitación, indemnización, garantías de no repetición y garantías de rehabilitación en forma permanente  a la familia y a las víctimas,  y en carácter simbólico también a toda la sociedad,  porque eso significa una demostración de transformación del Estado  en un verdadero estado democrático, de derecho, que respeta la memoria y la vida de todos sus habitantes, estén en el lugar que estén,  tengan la posición social que tengan”.

Además dijo que este acto será una gran oportunidad de dar muestras de trasformación  del  Estado, “será una acto para felicitar, pero también para organizadamente desde la sociedad civil, desde las organizaciones de derechos humanos acompañar y vigilar el cumplimiento cabal de todos y cada uno de los componentes de las sentencias de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que tiene un carácter pedagógico, con casi una hoja de ruta de política de estado en derechos humanos, para nuestros estados latinoamericanos”.

El acto de reconocimiento de responsabilidad internacional del Estado hondureño se realizará el lunes 12 de junio a las 9:00 de la mañana en el Museo del ferrocarril de la ciudad de El Progreso, con la presencia de autoridades gubernamentales, familiares, representantes de organizaciones sociales y de derechos humanos, entre otros.

La familia eligió esta fecha en memoria de Domingo Deras, porque esa fecha tomó la determinación de ponerle punto final al sufrimiento, al no poder superar la muerte de Herminio y sentía que no podía proteger a sus otros hijos, después de que nueve miembros de su familia fueran detenidos, secuestrados y torturados.

Para el Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (Cofadeh), el evento representa un acto reivindicativo y sanador para la familia Deras, luego de tantos años de seguimiento, encarcelamiento, torturas y amenazas.