Distinguido señor presidente, distinguido señor secretario general, distinguidos jefes de Estado, representantes y delegados presentes, ciudadanos del mundo…
A esta Asamblea General de 2023 Europa llegó hecha un nudo a la política exterior del Pentágono, abrazando la guerra de Estados Unidos contra Rusia desde el territorio ucraniano, mientras que Asia, África y América Latina llegaron hechos un nudo en respaldo a Cuba, Venezuela y Nicaragua.
África le habló directo a Inglaterra, Portugal y Francia en su condición de colonizadores violentos, que paguen los daños atroces causados a la población negra esclavizada por siglos. Y fue el mismo reclamo de los países caribeños, incluidos aquellos colonizados por holandeses. Señores, hasta aquí los monumentos. Demandamos Justicia Retributiva del Norte al Sur global. Inversión y restitución de nuestros derechos.
En cuanto a Latinoamérica, ahí hablaron fuerte Colombia, México, Chile, Argentina, Brasil y Honduras a través de Xiomara Castro, contra el robo de las riquezas de Venezuela, el embargo a Cuba que viola su derecho de autodeterminación, y las sanciones injustas a Nicaragua.
Después de las cumbres CELAC-Unión Europea en Bruselas y G-77 más China en La Habana, Honduras ha afianzado su posición multipolar en materia de relaciones internacionales y sin ningún temor a la reacción pitiyanki local, ha levantado la voz en el pódium de Nueva York contra el pillaje que dirigen Estados Unidos y sus socios. El sur empobrecido contra el norte enriquecido.
“Es importante terminar con la práctica de sanciones y confiscación de bienes de una nación contra otra”, dijo Xiomara Castro en alusión directa a los países europeos colonizadores y a Estados Unidos que usan sus armadas violentas para expoliar a las ex colonias.
“No podemos hablar de un mundo civilizado cuando vivimos expuestos a ser embargados y que nuestras reservas sean congeladas en bancos extranjeros como le ocurre actualmente a Venezuela, a quien se les confiscaron bienes violando todas las normas del derecho internacional.
Esta asamblea de Naciones Unidas, anualmente exige el fin del bloqueo contra Cuba, por ser una medida arbitraria, obsoleta y contraria al derecho internacional que viola el principio del respeto a la autodeterminación de los pueblos. Nosotros condenamos ese bloqueo contra Cuba y Venezuela, asimismo, exigimos que Cuba esté fuera de la lista de países calificados como terroristas por ser esa una medida manipulada y falsa.
También se debe eliminar las medidas y sanciones injustas contra Nicaragua, porque son barreras que nos impiden normalizar nuestras relaciones con el país hermano”.
Así lo dijo Xiomara en la Asamblea General de la ONU esta semana en coherencia al discurso de las naciones de peso del continente americano y en coherencia a la voz de China, Rusia y las naciones africanas, que construyen una nueva polaridad sin relaciones de dependencia ni subordinación a los mandatos de Washington.
Para eso contribuyeron las reuniones previas, para afinar este posicionamiento de solidaridad global, pues el mundo está expuesto a una guerra híbrida en la cual se juega la utilización de armas nucleares con capacidad de destrucción total y se está caminando sobre un termostato caliente que abre las puertas al infierno terrenal.
En términos bien claros lo dijo la presidenta hondureña a los representantes de las naciones del mundo. Ya no hay tiempo. “No se trata de tomar medidas (de resiliencia o de adaptación), sino de proponer cambios al sistema económico. No hay mano invisible, no existe ningún derrame de riqueza, la práctica nos enseña que la aplicación del capitalismo solo genera miseria y desigualdad frente a las grandes privaciones de miles de millones de seres humanos”.
Esta es una posición política bien definida, que tiene consecuencias por supuesto. Una posición que marca la ruta de Honduras hacia el futuro, un país cada vez más expuesto a los desequilibrios ambientales, una nación víctima del fascismo económico y de una extrema derechización de las religiones y de los partidos jurásicos, pero afortunadamente con un pueblo dispuesto a enfrentar lo que sea para salir adelante.
En esa determinación fueron muy importantes los mensajes de Xiomara hacia adentro, hacia la realidad hondureña, de cara a los representantes de las Naciones Unidas congregados en Nueva York.
La presidenta no olvidó en su discurso el hecho que en esa misma ciudad está el coyote jefe de la manada hondureña esperando la sentencia del juez Castel por conspirar contra Estados Unidos y organizar el tráfico de miles de toneladas de cocaína, liderando una organización del bajo mundo a través de Centroamérica que incluye empresarios, periodistas, pastores, alcaldes, ministros, diputados, generales y jefes de policía, algunos ya condenados.
Precisamente el día que Xiomara pronunciaba este discurso en la ONU, el juez Castel comunicó a la defensa del mafioso Hernández que ha desestimado todas sus objeciones a los expedientes confidenciales de la Fiscalía, porque el gobierno de Estados Unidos consideró que no aportaron nada en sus alegatos.
Con voz potente, la presidenta katracha describió a la Asamblea que esos asaltantes que secuestraron el Estado en 2009, hoy conspiran contra su gobierno, “organizados en una alianza de políticos corruptos y de supuesta sociedad civil, con el objetivo de detener las propuestas de cambios estructurales que el pueblo ordenó en las urnas.
Son los mismos – dijo Xiomara — que asesinaron a Morazán en 1842 y que hoy se oponen a la aprobación de la ley de justicia tributaria. Boicotean la elección del nuevo fiscal general para perpetuar la impunidad a la que están acostumbrados, y entorpecen la llegada de la Comisión Internacional de Combate a la Corrupción e Impunidad”. Pum, pum, sí señor, ¡directo al grano!
Por esas palabras de Xiomara en la ONU es oportuno repetir lo que hemos dicho muchas veces aquí en esta columna editorial: La sentencia de 2024 no será contra Juan Orlando Hernández, sino contra el partido nacional, el partido liberal, las ONGs del consenso de Washington y contra las bandas público-privadas que en asociación ilícita operaron y siguen operando la narco dictadura. La sentencia de joh será contra todos estos canallas que el pueblo ya conoce.
Para una mejor comprensión de los problemas sociales en Honduras, la presidenta Castro le explicó a los europeos y a los estadounidenses con naranjas y manzanas durante su discurso. Les dijo, por ejemplo, que las constantes caravanas de migrantes hacia Estados Unidos y España no es posible comprenderlas negando los 13 años de dictadura criminal tutelada por ellos, por la Comisión Europea y la OEA. El negacionismo de la dictadura oculta la deuda pública multiplicada seis veces, y oculta la tasa más alta de pobreza en la historia de Honduras que alcanzó el 74% de la población total.
El negacionismo, propio de la nueva ola fascista que recorre el mundo, trata de impedir el mandado político contundente de desmantelar el narco Estado y castigar la corrupción público-privada, que destruyó la institucionalidad, adulteró la voluntad popular con sendos fraudes electorales e impuso el terrorismo de Estado con escuadrones de la muerte avalados por ustedes.
La presidenta explicó que el pueblo demanda el retorno al Estado de derecho y la restitución de la dignidad pisoteada por esos criminales que sabotean la CICIH, y que todavía tienen el cinismo de decir que ya se tarda. Léperos, son ustedes que no aprueban las reformas habilitantes. Es con ustedes que hablamos.
En coherencia a esta demanda popular, Xiomara protagonizó tres acciones decisivas en Nueva York durante la semana. Primero, entregó al secretario general Guterres la propuesta de convenio para el establecimiento de la CICIH, imparcial, autónoma e independiente. Con la entrega, le dijo a Guterres que depurar las instituciones públicas en Honduras implica enfrentar a los piratas de la clase política y sus asociaciones público-privadas infiltradas por el crimen organizado. Una gran tarea. Un gran desafío.
La segunda acción realizada por la presidenta fue entregar el primer informe con 14 avances puntuales para acceder de nuevo al programa compacto de la Cuenta del Milenio en 2024. Estaban presentes cooperantes internacionales y funcionarios de la Cuenta del Milenio, que miden el desempeño de los países en transparencia, educación, salud, igualdad de género y sostenibilidad ambiental.
Los canallas deben comprender que dejaron a Honduras por el suelo en materia de percepción de transparencia, y subir ese indicador siquiera al 50 % es «una labor titánica» como ha dicho Rudo Pastor, una tarea que implica derogar pactos, leyes y fideicomisos, que las organizaciones criminales representadas en el Congreso Nacional dificultan, retrasan y negocian.
La tercera acción de la presidenta fue recibir personalmente el acuerdo del Fondo Monetario Internacional por un total de 822 millones de dólares para su programa de reforma económica e institucional, mejorar la transparencia y aumentar la inversión pública.
En su primera reacción tras recibir el anuncio, la presidenta dijo desde Nueva York que su plan de refundación y política económica sin fideicomisos ni alianzas público-privadas ha sido reconocido en el Programa del FMI, incluida la Ley de Justicia Tributaria, satanizada por quiénes se niegan a pagar impuestos.
Por su parte, la ministra de finanzas twitteó que, contra todos los pronósticos, siguiendo instrucciones de la presidenta, el Gabinete Económico ha concluido con éxito el Programa aprobado por unanimidad en el directorio del FMI. La Ley de Justicia Tributaria que evidenció la vileza y podredumbre del sistema, está incorporada dijo Riccy Moncada.
Bueno, así fue Nueva York en 2023, tremendos mazazos para el BOC…. ¿Pusieron atención? El discurso de Xiomara sin bemoles a favor de los pueblos de Cuba, Venezuela, Haití y Nicaragua; la negación de Castel a todas las objeciones de la defensa de joh; la propuesta final del acuerdo para instalar la CICIH; la bienvenida a Honduras al Banco Regional del Sur, y la aprobación unánime de casi 900 millones de dólares por el Fondo Monetario para aumentar la inversión social en salud y educación durante el mandato de la resistencia popular.
Ajá? Y entonces…
Buenas noches
Editorial Voces contra El Olvido, sábado 23 de septiembre de 2023