Por Marpa.
Tocoa, Colón.- Organizaciones del movimiento social del Bajo Aguán y defensoras de derechos humanos, denunciaron el intento de secuestro del que fue víctima el pasado 14 de noviembre en horas de la noche, el corresponsal de Radio Progreso y periodista del DiarioColón.hn, César Obando Flores.
En un comunicado emitido el 15 de noviembre, por parte de la Coordinadora de Organizaciones Populares del Aguán (COPA) se expresa que el comunicador social del DiarioColón.hn y corresponsal de Radio Progreso sufrió un intento de secuestro cerca de su lugar de residencia, por parte de sujetos desconocidos quienes con clara intención pretendieron privarlo de su libertad.
“Flores ha estado cubriendo las actividades del Comité Municipal de Defensa de los Bienes Comunes y Públicos de Tocoa, de las organizaciones defensoras de derechos humanos y de la comunidad de Guapinol quienes han sufrido una fuerte criminalización, amenazas, intervención policial y militar, actos de tortura y campañas de odio por parte de la Empresa minera Inversiones Los Pinares”, denuncia el comunicado.
COPA subrayó que la empresa minera Inversiones Los Pinares ha generado una serie de campañas de odio contra César Obando Flores por brindar cobertura periodística a los actos de tortura, amenazas y criminalización por parte de la empresa minera en mención, en contra del Comité Municipal y la comunidad de Guapinol y el sector San Pedro de Tocoa, Colón.
César Obando Flores es beneficiario de medidas cautelares de protección emitidas por la Comisión Interamericana de derechos humanos CIDH y aplicadas por el Mecanismo de Protección en Honduras, por lo que COPA exigió que dichas medidas se cumplan con celeridad, a fin de brindar protección al periodista.
“Condenamos el hecho y exigimos investigación inmediata por parte de las instancias correspondientes aunque se tiene desconfianza porque están coludidas con la Empresa minera Inversiones Los Pinares, quien supuestamente compra la justicia y la clase política que está a favor de la explotación de la minería y contra el pueblo del Municipio de Tocoa, Colón.
El Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH), La Fundación San Alonso Rodríguez (FSAR) y Abogados Sin Fronteras-Canadá) denunciaron y condenaron el hecho que pone en peligro la integridad física del comunicador social.
En declaraciones al periódico digital www.defensoresenlinea.com , César Obando Flores comentó que cuando se aprestaba a llegar a su casa el pasado jueves 14 de noviembre, ubicada en el Barrio El Estadio de Tocoa, alrededor de las 6:40 pm, dos individuos a bordo de una camioneta, (uno encapuchado y el otro no) “intentaron subirme al vehículo, logré correr, y uno de ellos me persiguió por una cuadra y corrí hasta una pulpería adonde había más gente”.
“Luego llamé a la policía, la cual hizo un patrullaje en ese momento y me informó que no encontró indicios de algún vehículo sospechoso como el que había reportado. Actualmente no he llegado al cuarto donde alquilo por temor a lo que ocurrió”, explicó Flores.
Flores tuvo otro incidente peligroso a principios de este mes de noviembre, cuando 4 individuos que se transportaban en un pick up Hilux color negro llegaron a su casa de habitación. Uno de los desconocidos ingresó al cuarto del comunicador y “me hizo una advertencia que dejara de meterme con la empresa Inversiones Los Pinares”, denunció.
Inversiones Los Pinares es la empresa que mantiene un proyecto minero en Tocoa que amenaza con contaminar los ríos Guapinol y San Pedro. Las comunidades del mismo nombre, han estado exigiendo la salida de dicha empresa, pero tanto el Ministerio Público (MP) como los tribunales de justicia han criminalizado a 32 ambientalistas, de los cuales 7 permanecen privados de libertad en el Centro Penal de Olanchito, antes de permanecer recluidos durante más de 2 meses, en la cárcel de máxima tortura conocida como La Tolva, localizada en el municipio de Morocelí, departamento de El Paraíso.
“El tipo que entró a mi casa usaba botas militares y no se hizo pública la denuncia, porque ellos me dijeron que si hacía pública la denuncia, se iban a dar cuenta y que conocían donde vivía mi familia”, sostuvo Flores.
El comunicador social dijo que durante 13 días en los cuales no informó nada sobre la situación de Guapinol no había pasado nada, no fue sino hasta que retomó la cobertura periodística de este caso, cuando se registró la amenaza de secuestro, que ha puesto su vida en peligro.
