La presidenta Xiomara Castro pidió perdón en nombre del Estado de Honduras por en el asesinato de Pedro Magdiel Muñoz Salvador

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El Paraíso.- La presidenta de la República, Xiomara Castro, pidió perdón en nombre del Estado de Honduras   por en el asesinato de Pedro Magdiel Muñoz Salvador, “mártir de la resistencia contra el golpe político-militar de Estado”.

La ceremonia se realizó en el sitio donde Pedro Magdiel fue detenido y asesinado el 24 de julio de 2009 por elementos policiales y militares, en el sector de Alauca, El Paraíso.

“En mi condición de presidenta de la República y representante del pueblo, pido perdón en nombre del Estado de Honduras a los familiares de Pedro Magdiel, el tiempo que han y siguen sufriendo, y la dolorosa pérdida de Pedro Magdiel es un daño irreparable, la incesante búsqueda de justicia de parte nuestra no termina aquí”.

Señaló que el Estado tiene la obligación de proteger la vida y la seguridad del pueblo hondureño, así como garantizar la reparación, ese reconocimiento público de la responsabilidad internacional.

“Mi gobierno socialista democrático sea para recuperar la memoria, difundir la verdad, buscar justicia y lograr la reparación de las graves violaciones que cometieron los golpistas contra los derechos del pueblo hondureño en el marco del acuerdo de cumplimiento a las recomendaciones al informe  de admisibilidad y fondo de la Comisión  Internacional de Derechos Humanos,  firmado el pasado 24 de mayo del 2023 en mi despacho en Casa Presidencial, junto a los representantes  y familiares de Pedro Magdiel”.

Así mismo, la mandataria instó al Procurador General de la República, Manuel Díaz Galeas, a cumplir con cada una de las medidas de reparación adscritas en el acuerdo.

“Aquí mismo, le solicito se comience a cumplir con las medidas de indemnización de las víctimas”, seguidamente, también “instó al Ministerio Público a realizar investigaciones efectivas que den con la verdad de los hechos y deducir responsabilidades penal y administrativa de aquellos que han hecho sufrir a nuestro pueblo”.

Ordenó a los funcionarios del poder ejecutivo a prestar toda la colaboración que la Procuraduría General de la República requiera.

En el acto, la mandataria, recordó  que “hace 15  años estuve aquí junto al pueblo, con miembros de mi familia, incluyendo mi madre y la madre de Mel, enfrentamos a los golpistas, a los policías y militares.

“El presidente Zelaya intentaba ingresar por la frontera de Las Manos, la dictadura golpista  violadores  de los derechos humanos, los que arrancaron la democracia de un zarpazo, nos sacaron,  nos gasearon  y reprimieron para impedir nuestro avance”, señaló la mandataria.

Agregó que “todos esos desplazamientos de miles, es conocido por la marcha y el sacrificio  de Alauca, la historia y la memoria sabe todo lo que tuvimos que soportar”.

Este lugar es simbólico, aquí  junto al pueblo hondureño en resistencia, que expuso su vida por defender sus principios y valores del bien común, arriesgaron su seguridad para defender la soberanía popular de Honduras.

En su discurso señaló que de acuerdo con el informe de la Comisión Internacional de Derechos Humanos, el 24 de julio de 2009 Pedro Magdiel fue detenido públicamente sin justificación por miembros de las fuerzas policiales de Honduras, siendo el 25 de julio encontrado su cuerpo sin vida a metros de donde hoy nos encontramos.

“El vil asesinato de Pedro Maddiel fue dantesco, allí están publicadas las evidencias, un hecho que carga en su conciencia aquel gobierno de criminales y de facto”.

“Pedro Magdiel, como tantos mártires de la resistencia, son un ejemplo de lucha y convicción de la cruel y despiadada represión de quienes desnaturalizaron el verdadero sentido y el espíritu de nuestras fuerzas armadas y de la policía nacional, cuya misión debe ser siempre respetar los derechos humanos y ser los protectores del pueblo hondureño”, añadió.

Así mismo señaló que “era la mano criminal de las elites económicas que financiaron el golpe, las estructuras políticas homicida de las cúpulas de los partidos tradicionales que controlaban Honduras, durante aquellos terribles momentos que estremecieron al mundo, a pesar de esa represión, de esos asesinatos, de esas fragrantes violaciones a los derechos humanos de las campañas mediáticas de las falsedades de los 12 años 7 meses de perseguirnos,  jamás pudieron silenciarnos”.

Pedro Magdiel fue detenido en el desvío a Alauca, El Paraíso, por elementos del ejército y la policía la tarde del 24 de julio de 2009, mientras fumaba un cigarro a la sombra de un árbol; a la mañana siguiente, a unos cien metros del lugar donde había sido detenido el día anterior, fue encontrado su cuerpo sin vida, el cual presentaba señales de tortura y tenía al menos 42 heridas de arma blanca.

El crimen de Pedro Magdiel se da durante la movilización de varias personas opositoras al gobierno de facto hasta la frontera de Las Manos en la zona del departamento de El Paraíso, para acompañar el ingreso del expatriado presidente Manuel Zelaya Rosales.

El acto de reconocimiento de responsabilidad en el asesinato de Pedro Magdiel, se da en cumplimiento a las recomendaciones al informe de admisibilidad y fondo No 451/21 de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) del 25 de diciembre de 2021.

En su informe, la CIDH concluye que el Estado de Honduras es responsable por la violación de los derechos a la vida, a la integridad personal, a las garantías judiciales, a la libertad de expresión, al derecho a reunión, a la asociación y a los derechos políticos y protección judicial establecidos en la Convención Americana, en perjuicio de Pedro Magdiel Muñoz Salvador.

“El Estado está en deuda con el pueblo hondureño” finalizó diciendo la presidenta de la república de Honduras Xiomara Castro.