Tegucigalpa.- Enrique Apolinario, encargado derechos humanos de América Latina en la Organización Mundial Contra la Tortura (OMCT), terminó su visita a Honduras y antes de regresar a sus labores diarias dialogó con defensoresenlinea.com, sobre los hallazgos y resultados encontrados durante su gira al país.
“Estuve en Tegucigalpa y San Pedro (Sula), me encontré con personas de COFADEH (Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras) con organismos nacionales de derechos humanos, y pude constatar muchas cosas”, comenzó diciendo.
Agregó que “la OMCT acompaña con atención el proceso de desmilitarización de las cárceles hondureñas, yo estuve en el Centro de Integración de niños y es una construcción realmente que no está equipada para tener niños allí, porque es una prisión súper mal construida, seguro con presupuesto inmenso, y se asemeja más a un Complejo Militar que a un centro pedagógico”.
A criterio de la OMCT, el Centro de Internamiento es un lugar para poder albergar a los niños no para educarlos.
Además, el encargado de la OMCT habló sobre los hallazgos en el caso de violaciones a derechos humanos y uso de la fuerza de las fuerzas de seguridad pública de Honduras.
“Sobre los casos de violaciones, de tortura y de uso de la fuerza por las fuerzas de seguridad en Honduras, la OMCT acompaña con mucha atención y preocupación, porque, aunque las investigaciones empiecen, no hay una respuesta pronta y eficaz a las víctimas; muchas víctimas tienen que esperar años para tener una respuesta mínima del estado”, señaló.
Además, agregó que mientras llega una condenación, no hay ninguna medida de reparación para esas personas que sufrieron violaciones, y ellos y ellas, tanto las víctimas de violaciones y de torturas, cuanto a defensores de derechos humanos, sigue sin protección por el estado de Honduras.
“No hay mecanismos eficaces de protección a esas personas que ellos mismos tiene que ser protagonistas de luchar por sus derechos, muchas veces no dan respuestas apropiadas a las condiciones de vulnerabilidad a esas personas”, sostuvo.
Sobre el caso de la estudiante de enfermería Keyla Patricia Martínez, señaló que es un feminicidio agravado por la relación de poder que existía en la detención de la joven.
“El caso de Keyla que de seguro feminicidio agravado, fue una joven ejecutada bajo custodia del Estado por su condición de mujer, estaba en un lugar donde no debería estar, que es en la cárcel donde estaba bajo custodia de hombres, y en esta condición fue asesinada, entonces es necesario que el estado dé respuestas eficaces a este crimen bárbaro y también reparaciones a su familia, y que lo hagan pronto, que lo haga de manera efectiva”, manifestó.
En este caso, el encargado de la OMCT solicitó una reunión con la Sala Constitucional de la Corte Suprema de Justicia para hablar sobre el caso y sobre las accione que la OMCT ha realizado, pero no obtuvo ninguna respuesta de ese ente judicial.
El Grupo ha clamado por un análisis del caso a la luz de los estándares internacionales sobre la protección de las mujeres contra la violencia cometida por el Estado.
La OMCT constituye la principal coalición internacional de organizaciones no gubernamentales que luchan contra la tortura, las ejecuciones sumarias, las desapariciones forzadas y cualquier otro tratamiento cruel, inhumano o degradante alrededor del mundo.