Tegucigalpa.- “Seguiremos comprometidos totalmente con el COFADEH, con todas las instituciones que ayudan a la gente que necesitan buscar justicia para todos los que son atropelladas como yo, que fui levantado de mi cama a los doce años, con un fusil en la cara y con un golpe y que hasta este momento lo recuerdo, es algo muy duro”.
Así comenzó narrando Marlon Javier García, sobrino de Herminio Deras, después de finalizado el acto público de perdón por parte del Estado de Honduras por el asesinato de su tío el 29 de enero de 1983.
Marlon también fue víctima de la Doctrina de Seguridad Nacional junto a su familia.
“Este acto es algo que hemos estado esperando por mucho tiempo y hemos estado viajando y buscando la justicia que nuestra familia necesitaba. Me gustó el acto, está bien, por lo menos el Estado de Honduras ha reconocido todos los atropellos que hizo contra nuestra familia”, añadió.
Además, señaló que es algo que ha sido esperado por muchos de nuestros familiares que el gobierno tome el puesto que se merece, como el que causó todas las arbitrariedades de nuestra familia y que se haya pronunciado, que acepta la responsabilidad es algo que hemos estado buscando desde el inicio de este caso”.
Finalizó diciendo que este es solo un paso para la justicia que la familia Deras García han estado buscando.
Por su parte, Irma Deras, hermana de Herminio, expresó que “estamos bastantes satisfechos, muy comprometido el Estado, creo que este acto es un acto histórico en que en el Estado ha pedido perdón y este es un paso para ir sanando heridas, pero también para demostrarles a todos aquellos luchadores que no hay que tener miedo, la lucha por una Honduras mejor, decía Herminio, debe contar con los más valientes”.
“Esta lucha de Herminio que hoy quedó plasmada en la ciudad de El Progreso no fue en vano, su sangre luchadora convocó a generaciones viejas y generaciones jóvenes, muy comprometidos y muy satisfechos con el Estado de Honduras, con el gobierno de la presidenta Xiomara (Castro) por traernos a este acto tan hermoso”, añadió.
Irma, señala además que este acto se realizó en una fecha muy importante y significativa para toda la familia Deras.
“Hoy, el 12 de junio, es una fecha dolorosa para nosotros la familia Deras García, porque un día como hoy, a las 7 de la mañana, nuestro padre decidió terminar con su dolor, con su frustración”.
Añadió que “la ida al cementerio tiene dos objetivos, conocer que allí está enterrado nuestro padre y que está Herminio también allí, y para que nuestras generaciones también conozcan ese sendero, pero que también el pueblo sepa que el Estado va a ser un mausoleo como parte de la sentencia que emitió la Corte Interamericana de Derechos Humanos, allí se va a hacer un mausoleo a Herminio, y por supuesto también va a hacer para nuestro padre, víctima de tortura y arresto, igual para nuestra hermana Consuelo que era la mayor, víctima de desapariciones y torturas”.
Cabe mencionar que al finalizar los actos, la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL) entregó una serie de fotografías a la familia presente, como parte de un homenaje a los que ya no están, pero que sufrieron en carne propia la persecución, arresto, tortura, y amenazas.
“Ellos son víctimas también, de estas políticas de represión implementadas por la Doctrina de Seguridad Nacional, en las fotografías están: mi padre Domingo Deras; mi madre María García; mi hermano Héctor García, que falleció en el exilio; Consuelo Deras, que fue también víctima y no sobrevivió y está el último de nuestros muertos, que precisamente en mayo cumplió un año, Cristóbal Rufino, padre y madre de nuestras sobrina Sandra Hernández, que vive en el extranjero indocumentada, que no pudo asistir a ninguna de los entierros de sus padres y que no pudo venir a este acto y que entonces esas fotografías va ser entregadas a ellas, que además son como muestra de que no los olvidamos que estaban aquí”.