Texto y fotos: Sandra Rodríguez
Tegucigalpa, Honduras.- Desde la realidad plasmada por organizaciones defensoras de derechos humanos, la Ayuda Protestante de Suiza (HEKS-EPER) prepara su plan de incidencia para los siguientes tres años en el país.
Por lo que esta semana, representantes de la agencia internacional realizan un taller con organizaciones co-partes que tienen presencia en los departamentos de Choluteca, Valle y el sur de Francisco Morazán. Esta región ha mostrado un aumento a las violaciones de derechos humanos desde el fraude electoral de noviembre del 2017, además de las constantes violaciones a la tierra y territorio, y con ello la criminalización contra defensores y defensoras.
Una de las facilitadora para esta teoría de cambio, al culminar esta fase de trabajo en Honduras, es Mónica Hess, oficial de monitoreo y Evaluación de HEKS-EPER, quien estará recopilando insumos desde las organizaciones entre el 8 y 11 de julio, al oriente de Tegucigalpa, e iniciar otro periodos de cooperación.
La idea es armar una teoría de cambio en el marco del programa pro derechos, que impulsa HEKS, para ello es importante las reflexiones individuales de cada representante de organizaciones, juntarlas y priorizar temas para llegar a acciones que se deban incluir en la próxima fase.
Hess expresó a Defensores en Línea que los y las participantes han mencionado temas como la militarización de la zona y la necesidad de protección, por lo que si hay cambios sociales se deben adaptar los programas.
Trabajar juntos
Para Heks, no es desconocida la realidad hondureña, ya que desde la década de los 80 mantiene presencia en la nación centroamericana, aunque no de forma tan visible, como ahora que tiene oficina permanente.
Si bien, se evalúan condiciones para dejar un país, Honduras no está en esa lista, y lo confirma la preparación de este nuevo proceso, donde se cuenta con la presencia de Leo Meyer, responsable de programa para los países de Honduras y Colombia.
Meyer ha percibido desde el sentir de la población, la difícil situación en Honduras “así nos lo dice y hace sentir la gente, esperamos que eso cambie luego”.
Las organizaciones co-parte de HEKS-EPER son: Plataforma Honduras, Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH), Asociación para una Ciudadanía Participativa (ACI-Participa), Peace Watch Switzerland (PWS), Comité para la Libre Expresión (C-Libre) y el Centro de Investigación y Promoción de los Derechos Humanos (CIPRODEH).
El representante de HEKS afirmó que, el objetivo de estar esta semana compartiendo con este grupo, es reflejar lo que han hecho y lo que deben hacer en la nueva fase, porque los problemas van a estar y se necesita estar preparados.
Destacó que, el potencial de la Ayuda Protestante de Suiza y sus co-partes es trabajar juntos, tal como la ecuación matemática de que 1+1 es 2, y el resultado se va a reflejar sobre la teoría de cambio, por lo que en este momento hay que ver “lo que se necesitamos para lograr lo que queremos”.
En cuanto a su labor coordinando programas en Colombia y Honduras, Meyer tiene una visión de la situación de ambas nacionales, encontrando similitudes y diferencias en el tema de defensa y violaciones a derechos humanos.
En Colombia estamos en una zona donde el Estado no existe –afirmó- especialmente en la región atlántica, ahí desde hace años la gente no ha visto a la policía, sino que hay grupos criminales más grades (mafias) que dictan el qué hacer de las comunidades. Por el contrario en Honduras, el Estado se refleja a través de las fuerzas militares.
Por lo que, allá –Colombia- si el gobierno no actúa no es porque no quiera, es posible que no pueda por la extensión territorial ¡es que no puede! En cuanto al negocio de la droga no es tanto la producción-cultivo sino el tráfico.
Es que, a HEKS le preocupa el desarrollo regional, la libertad de todos y rodas, pero no hay ingresos por lo tanto es importante trabajar en ambos lados (sostenibilidad y defensoría). Que la situación mejore.
En América Latina es muy especial la situación porque la gente lucha, lucha, lucha. Mientras que en otras parte de África y Asia no existe la esperanza que las cosas pueden cambiar y aquí sí. Leo Meyer, responsable de programa Heks para Honduras y Colombia.
Consiente de la situación donde tiene presencia la agencia internacional, Meyer resaltó que, como HEKS no podemos cambiar la situación en Honduras. Necesitamos co-partes y gente que quiera lucha por el cambio. En cuanto a esto, ha visto receptividad y participación de las organizaciones defensoras de derechos humanos.
Al preguntarle sobre la continuidad del apoyo a la región, representante de Heks, afirmó que, “América Central no está en nuestra lista de salir, porque empeora la situación de derechos humanos, vamos a continuar trabajando con organizaciones muy activas. A veces es imposible ver alances muy rápido”.
Cuatro décadas en Honduras
Conforme a las necesidades del país, Heks ha ido avanzando desde programas de producción agrícolas en la década de 1980 y rehabilitación tras el paso del huracán Mitch (1998), y derechos humanos y defensoría después del golpe de Estado del 28 de junio del 2009.
Y fue en el 2012 en el marco del proyecto “Formación e información en Derechos Humanos en la zona Sur del país”, que ya está en la tercera fase, y ante la necesidad acompañar, documentar y denunciar violaciones a los derechos humanos, el COFADEH con el apoyo de HEKS-EPER dio origen a la Red de Defensores y Defensoras de Derechos Humanos del Sur del país (REDEHSUR).
-Por el COFADEH, participan en la jornada, su coordinadora general Berta Oliva, y del Área de Proyectos Claudia Amaya-.
Para seguir los procesos, primero se contextualiza el país y luego se define el próximo programa para cuatro años, explicó la directora de Heks para Honduras, Leticia Flores.
Esta semana es de retroalimentarnos, agregó Flores, y ya hay sugerencias para temas como enfoque de género y atención sicosocial, solo queda definir lo que se abordará, porque los recursos son limitados.
Lo que se realice será en el marco de Pro- derechos, que es un programa para atender las violaciones a derechos humanos que se están dando en el marco de este sistema de gobierno implementado en Honduras desde el año 2009. Leticia Flores, directora de país Heks- Honduras
Si bien, desde el año 2000, estábamos preparados para atender la problemática de violaciones a derechos humanos, no definimos la intensidad con la que la población está defendiendo los derechos al territorio (agua, tierra y recursos fitogenéricos) especialmente el tema agua, porque la zona sur ya de por si tiene problemas con el agua, y la industria extractiva que pone en inminente riesgo el vital líquido, declaró Flores.
Otros temas que afectan la zona sur del país, es la migración, criminalización y persecución, las víctimas son hombres y mujeres, pero ellas denuncian menos, optan por callar y se retiran de la defensoría. Los hombres van y denuncian, las mujeres se quedan con la criminalización encima, intimidaciones y poco a poco van saliendo, es una debilidad no atender este tema, retiró la representante en Honduras.
La REDEHSUR ha llegado a los municipios de Santa Ana, Ojojona y Alubarén (Francisco Morazán); Nacaome, Amapala y San Antonio de Guarumas (Valle); Pespire, Orocuina, Morolica y Choluteca (Choluteca), donde deben enfrentar a autoridades civiles y militares-policiales debido a problemas ambientales, calentamiento global, desempleo, migración, olvido gubernamental, destierro y acceso a la tierra y playas. Militarización, persecución judicial, amenazas contra la vida, hostigamiento y vigilancia permanente.