Expulsión de Iván Velásquez sería un atentado contra la democracia

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Iván Velásquez, Comisionado de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala – CICIG

Guatemala, París.

La FIDH y su organización miembro en Guatemala CALDH, rechazan el intento del Presidente guatemalteco Jimmy Morales de expulsar del País a Iván Velásquez, Comisionado de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala – CICIG y solicitan al Presidente y a las autoridades guatemaltecas acatar la decisión de la Corte Constitucional, máxima instancia judicial en el país, que ayer suspendió provisionalmente la orden de expulsión del país del Comisionado Velásquez.

Las organizaciones le urgen al Presidente Morales no atentar contra la división de poderes, fundamento de la democracia. En consecuencia, la FIDH y CALDH le recuerdan que debe respetar las actuaciones legales de la CICIG y la Fiscalía General, incluyendo la solicitud de levantamiento de su inmunidad.

“La CICIG es un ejemplo a nivel mundial de buenas prácticas en la lucha contra la impunidad y la corrupción. La expulsión de Iván Velásquez constituiría un grave retroceso para la democracia Guatemalteca y favorecería la impunidad y las redes de corrupción en Guatemala. ”, señaló Dimitris Christopoulos, Presidente de la FIDH.

El trabajo en dúo del Comisionado de la CICIG y la Fiscal General, ha mostrado grandes resultados en el país. Es por eso una paradoja que el Presidente Morales, quien además ganó su mandato bajo el lema “Ni corrupto, ni ladrón”, haya declarado al Comisionado como persona Non grata.

El Viernes 25 de agosto el Comisionado Velásquez y la Fiscal General Thelma Aldana iniciaron el trámite para levantar la inmunidad del Presidente guatemalteco ante la Corte Suprema de Justicia, por el delito de financiación electoral ilícita, al parecer por transacciones ilegales por casi un millón de dólares en la campaña que lo llevo al poder en el 2015. Esto probablemente explica por qué el presidente Morales quiere expulsar al Comisionado Velázquez.

La movilización del pueblo guatemalteco y el rechazo de la expulsión de Ivan Velásquez por la gran parte de la institucionalidad guatemalteca son una muestra del reconocimiento y de la aceptación del trabajo realizado liderado por él. Al parecer, el rechazo del Ministro de Relaciones Exteriores, funcionario de carrera, de ejecutar la orden del Presidente Morales de expulsar al Comisionado le valió su salida del gobierno. Las organizaciones esperan que el rápido nombramiento de Sandra Jovel en su reemplazo, no sea para ejecutar esta orden en desconocimiento del amparo de la Corte.