Tegucigalpa.
Al cumplirse tres meses del asesinato de Rinel Eclicerio Argueta Oliva, a manos de agentes policiales en el municipio de San Esteban, Olancho, mañana 22 de septiembre el Ministerio Público exhumará su cadáver, con el objetivo de practicarle una autopsia y obtener pruebas que ayuden con la investigación del caso.
Argueta Oliva perdió la vida luego que su vehículo fuera atacado a disparos por agentes policiales, quienes realizaban un operativo a la altura de la comunidad de Corral Viejo, jurisdicción del municipio de San Esteban.
Por el crimen de Argueta Oliva, el Ministerio Público acusó a cuatro agentes policiales, siendo ellos: Elmer Alexánder Castellanos Castillo, Melvin Josué Murillo Gonzales, Ruperto Antonio Rodríguez Zelaya, Alex Manrique Andara Vallecillo, a pesar que en el operativo participaron siete policías.
Procuradoras de derechos humanos del Comité de Familiares de Derenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH), como acusaduras privadas, estarán presentes en la zona, durante la exhumación del joven, asesinado en el marco de aislamiento por la pandemia del Covis-19, donde la policía y militares permanecen en las calles, según el Decreto Ejecutivo PCM 021-2020 de marzo pasado.