Tegucigalpa.- Con el objetivo de hacer una reflexión colectiva, a fin de cultivar una conciencia histórica crítica y consciente de los hechos que nunca deben repetirse, 16 estudiantes de la asignatura de Historia y Filosofía y tres docentes de la Universidad Politécnica de Honduras (UPH), sede Choluteca, realizaron el recorrido de la Ruta de la Memoria Histórica.
La Ruta de la Memoria Histórica son sitios que durante la aplicación de la Doctrina de Seguridad Nacional en los años ochenta fueron utilizados por los militares como centros de tortura, cárceles clandestinas y cementerios clandestinos.
Con esta actividad educativa, la UPH busca promover la memoria histórica de los hechos ocurridos durante la reciente historia de nuestro país, especialmente en relación con las violaciones de derechos humanos y las desapariciones forzadas que marcaron a muchas familias hondureñas.
El recorrido de la Ruta de la Memoria, que honra el legado de lucha de las víctimas y sus familias, fue guiado por los jóvenes Embajadores de la Memoria Berta Nativí, Laura Aly y Camilo Ramírez, y por la procuradora de los derechos humanos, Mery Agurcia.
En la sede del Cofadeh dio inicio el recorrido, donde se les contextualizó cómo un grupo de 12 familias, de 69 que eran víctimas de la desaparición forzada, conforman el 30 de noviembre de 1982 el Cofadeh, con el objetivo de recuperar con vida a sus parientes desaparecidos por el Estado.
Se les explicó que en algunos casos se logró el objetivo, pero que en la mayoría de ellos no se logró.
También se les explicó como el gobierno de los Estados Unidos, a través de las Fuerzas Armadas de Honduras, implementaron la Doctrina de Seguridad Nacional, donde numerosas personas, hondureñas y extranjeras, sufrieron persecuciones, amenazas, torturas, desapariciones y asesinatos a manos de miembros de las fuerzas de seguridad del estado.
Los participantes visitaron la Sala de Memorias Vivas, espacio donde se encuentran los rostros de las víctimas de la aplicación de la Doctrina de Seguridad Nacional en la década de los 80.
Durante por este viaje por el pasado, se visitaron los edificios donde en esa época funcionaban los tres poderes del Estado, la antigua Casa Presidencial, el Congreso Nacional y la sede de la Corte Suprema de Justicia, actualmente Museo del Hombre. Así como el antiguo edificio de donde funcionaban los laboratorios del doctor Ramón Custodio López, hasta donde llegaban los familiares a interponer las denuncias y donde les ayudaban a redactar los habeas corpus, que luego presentaban ante los juzgados y la Corte Suprema de Justicia.
También se visitó el parque La Merced, conocida por los sobrevivientes y por los familiares de las víctimas, Plaza de Los Desaparecidos. Aquí los jóvenes Embajadores les explicaron a los estudiantes que desde hace más de 42 años las madres y familiares acuden a este lugar a realizar sus acciones de protestas, para exigir a los gobiernos de turno verdad y justicia.
Asimismo, a los participantes se les explicó que en el casco histórico de la Capital hay otros sitios emblemáticos que son parte de la Ruta de la Memoria Histórica, que por el tiempo no se pudieron visitar.
Se les mencionó la sede de la Dirección de Investigación Nacional (DIN), actualmente la Unidad Metropolitana de Prevención número 1 (UMEP-1), lugar donde en la década de los años 80 se cometieron graves violaciones de derechos humanos.
También se les habló al grupo de estudiantes de los lugares de donde fueron detenidos por las fuerzas de seguridad del estado los dirigentes estudiantiles Ángel Manfredo Velásquez Rodríguez, Eduardo Becerra Lanza y Roger Samuel González Zelaya.
Posteriormente, después de haber realizado el recorrido por estos sitios, los que se ubican en el casco histórico de Tegucigalpa, el grupo de estudiantes universitarios se trasladó al sector de Amarateca, para visitar el Museo Contra el Olvido, sitio que fue utilizado como centro de tortura y muerte, y sus predios como cementerio clandestino.