La Asociación de Cooperación internacional (Espacio ACI), constituida por 27 ONGs internacionales con presencia en Honduras, condenamos rotundamente el asesinato de José Ángel Flores, presidente del Movimiento Unificado Campesino del Aguán (MUCA) y Silmer Dionisio George, miembro y ex directivo de una empresa del asentamiento La Confianza, ocurridos el 18 de octubre. Exigimos una pronta y efectiva investigación para enjuiciar a los a autores materiales e intelectuales.
A quienes integramos el Espacio ACI nos preocupa que, a más de un año de la aprobación de la Ley de Protección para los y las Defensores de DD HH, Periodistas, Comunicadores Sociales y Operadores de Justicia, el mecanismo de protección del Estado aun no funcione. Tanto José Ángel Flores como Silmer Dionisio George gozaban de medidas cautelares otorgadas en 2014 por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Sin embargo nunca recibieron protección de parte del Estado de Honduras. Asimismo el MUCA ha denunciado en varias ocasiones ante las autoridades la existencia de un grupo paramilitar dedicado a cometer actos de violencia en contra del MUCA, pero estas denuncias no han sido investigadas.
El Espacio ACI también está alarmado per la persistente impunidad en casos de asesinatos relacionados con el conflicto agrario en el Bajo Aguán. Desde julio de 2014, la Corporación Financiera Internacional (lFC por sus siglas en inglés) ha contratado al Consensus Bulding Institute (CBI) para fomentar un diálogo constructivo entre las partes en conflicto en el Bajo Aguán en búsqueda de soluciones definitivas. Producto de este diálogo se ha identificado la impunidad como una de las causas principales del conflicto con la recomendación de fortalecer los procesos de investigación criminal mediante asistencia experta e independiente. Aunque cuenta con el respaldo de una amplia gama de actores del Bajo Aguán y de la Cooperación Internacional, hasta la fecha el Gobierno de Honduras no ha otorgado los recursos suficientes para que el Ministerio Público pueda implementar esta recomendación. Más de dos años y medio después de su creación, aun no se conocen los resultados de las investigaciones de la Unidad de Muertes Violentas del Bajo Aguán (UMVIBA).
La violencia siempre florecerá bajo condiciones de impunidad. Cada acto de violencia debilita la posibilidad de resolver conflictos y de encontrar soluciones sobre la base del diálogo y la confianza mutua. La resolución del conflicto en el Bajo Aguán es posible si el Estado de Honduras asume el liderazgo con la imparcialidad que le corresponde, iniciando con acciones contundentes para combatir y reducir la impunidad. El Espacio ACI espera que el asesinato de José Ángel Flores y Silmer Dionisio George no sea un caso más que queda en la impunidad, corro tantos otros en el Bajo Aguán y en el país en general.
Enviamos nuestras sentidas condolencias a las familias de ambos líderes campesinos; así como a sus compañeros del movimiento campesino del Bajo Aguán.
Tegucigalpa, 21 de octubre de 2016