Tegucigalpa M.D.C.
Las jóvenes feministas están organizadas en varios departamentos del país, para aprender acerca de sus derechos y exigir mayor participación política.
Una de las acciones del Centro de Estudios de la Mujer CEM-H es impulsar un proceso de formación y capacitación con la población de mujeres jóvenes y adolescentes, para el planteamiento de una agenda política integrando a feministas de los departamentos de Intibucá, la Paz y Tegucigalpa.
Las jóvenes y adolescentes son uno de los sectores más vulnerables que a diario enfrentan acoso sexual, violación, discriminación, rapto, incesto, pornografía infantil, estupro, hostigamiento sexual, proxenetismo, actos de lujuria, trata de personas y femicidios entre otros.
Entre los años 2005 y 2015 aproximadamente 4,484 mujeres fueron asesinadas, solo en el 2015, 471 mujeres fueron víctimas de femicidios en donde el mayor porcentaje se encuentra entre las edades de 15 a 39 años con un 69.4% de mujeres jóvenes y adolescentes.
Mientras que en el 2010 y el 2014 se reportaron 4,521 denuncias por delitos sexuales y solo el 19% fueron sentenciados; las denuncias presentadas a instituciones del Ministerio Público suman más de 15,000 en los cinco años con una impunidad del 95 por ciento.
Alejandra Espinal del equipo del CEM-H expresó que la agenda de trabajo fue netamente para mujeres jóvenes de Santa María, Yamaranguila, La Esperanza, las que pasaron por un proceso de formación sobre violencia e incidencia política.
“El objetivo del foro es que la jóvenes puedan tener un poco más de conocimientos de los tipos y las formas de violencia, porque ha incrementado el número de femicidios y muertes violentas de mujeres y adolescentes” dijo Espinal.
Otro de los puntos objeto de formación fue del liderazgo que se debe tener como mujeres jóvenes y la exigencia de sus principales derechos básicos manifestó la feminista.
Por su parte, Lilibeth Reyes feminista en resistencia y miembra de la red de mujeres jóvenes de la colonia “Ramón Amaya Amador” describió que dentro de su familia existió una historia de violencia y que su madre es sobreviviente de ella, que desde pequeña su progenitora comenzó a tener capacitaciones de genero con el CEM-H y que le enseño que no es normal el maltrato hacia las mujeres.
“Desde que tengo uso de razón por la violencia doméstica en mi casa, mi mamá sufrió violencia por parte de su pareja y cuando se dio cuenta decidió terminar con esa situación y me involucro y desde ese entonces comenzó mi activismo desde el 2000” indico Reyes.
La joven feminista adujo que “ser feminista es bastante difícil porque se sufre agresiones por parte de los hombres, pero también de otras mujeres, creen que ser feminista es dejar de ser mujer, yo soy feminista con tacones y cartera, existe una estigmatización con nosotras, nos dicen que somos marimachas, machorras, que nos gusta echar tortillas” añadió que “el espacio feminista no significa que una se va a acostar con una mujer o que odiamos a los hombres, es empoderarnos de nuestros derechos y defender los derechos de las demás mujeres”.
Para Reyes participar en los espacios feministas es aprender a hablar y decir las preocupaciones que viven las mujeres jóvenes en los barrios, las colonias, porque consideró que hay pocos lugares en donde las mujeres puedan desenvolverse lo que viven.
“El gobierno no sabe que estamos sufriendo violencia y el ejerce la violencia sobre nosotras cuando no hay verdaderas políticas de seguridad, hemos decidido organizarnos desde hace años porque era necesario para defender nuestros derechos y reclamar políticamente” aseguró la joven feminista.
Suyapa Martínez directora del CEM-H informó que el foro se planeó con el fin de elaborar una agenda con las mujeres jóvenes en donde uno de los puntos es la educación sexual dentro de los centros de enseñanza, porque se reportan 9,300 casos de partos de adolescentes anualmente en Honduras, se registraron más de 4,000 delitos sexuales, de los cuales el 70% de las víctimas son mujeres jóvenes.
“Un punto importante es la participación política de las feministas jóvenes para optar a cargos de elección popular, es importantísimo porque ellas son el presente del país” aseveró Martínez.
La luchadora feminista Indicó que algunos de los obstáculos que encontraron al principio fueron el machismo, el patriarcado y la influencia de la religión que predica que usar métodos anticonceptivos es pecado ante Dios, “sabemos que estos territorios son muy católicos, pero las facilitadoras han atravesado un proceso modular que de paso son jóvenes”.
En la agenda exigen la urgente implementación de una educación no sexista, incluyendo en la curricula la educación sexual y la no violencia contra las mujeres; la creación de programas de becas para mujeres jóvenes y adolescentes; elaboración de un programa de incentivo a nuevas tecnologías que incluya formación en informática y telecomunicaciones.
Además la aprobación de la Ley de Educación Integral para la sexualidad que ha sido presentado al pleno por la diputada Scherly Arriaga en octubre del 2015; que en el nuevo código se incluyan los delitos de violencia contra las mujeres jóvenes y adolescentes.
Exigen al Ministerio Publico y la Corte Suprema de Justicia investigar y judicializar los casos de femicidios, violencia intrafamiliar, doméstica y delitos sexuales contra las mujeres jóvenes y adolescentes.