El Comité de Familiares de Detenidos-Desaparecidos en Honduras (COFADEH), siempre presente desde 1982 en la lucha de clases que pone hoy en las calles al gigante de mil batallas, dice presente en esta conmemoración colectiva.
Las y los seres queridos desaparecidos, torturados, víctimas de la doctrina de seguridad nacional impuesta por Estados Unidos, estarían aquí. Están aquí. Nosotras somos ellos.
Por tanto, este 1 de mayo apuntamos nuestras energías demandantes hacia el Congreso Nacional donde por primera vez en 40 años de sufrimiento, las víctimas hemos sometido recientemente al Pleno una iniciativa de ley que reivindicaría la política y el Estado.
El compromiso de las y los diputados conscientes que tomaron la palabra, de todas las bancadas, es el de estudiar, dictaminar, discutir y aprobar esta ley limpia caras, ley de justicia transicional, antes del 30 de agosto próximo.
Justamente la deuda moral, jurídica, política, patrimonial e institucional del Estado de Honduras con más de 200 familias que sufrieron la violencia y el terrorismo organizado y financiado por Estados Unidos debe ser saldada con los principios universales de la justicia transicional.
Verdad. Justicia. Memoria Histórica. Reparación de los daños. Garantías de no repetición de los hechos.
No es dinero para taparle la boca a las víctimas y sobornar a los sufrientes que se está proponiendo, ni es una transacción comercial que se resuelve con el Banco Central por la vía del endeudamiento.
Que nadie se equivoque con la iniciativa de reparación a las víctimas de la doctrina de seguridad nacional. No se trata de una operación de jubilación post mortem ni de un baile de disfraces de supuestas víctimas. Esto es serio.
Se trata de una sanación de la herida mortal imprescriptible hecha a la sociedad hondureña con delitos de lesa humanidad cometidos por el Estado, empujado por la CIA, el Pentágono y el Departamento de Estado de Estados Unidos.
Hoy de nuevo reconocemos el Camino de Mayo como expresión de lucha y de victoria, de unidad y de fuerza colectiva. Estos elementos de transformación son ahora más indispensables para enfrentar el modelo de crimen organizado que pretende sin vergüenza regresar al asalto institucional del Estado inspirado por el coyote jefe de la manada que atiende su sentencia en Nueva York.
Desde estas calles donde está el poder del pueblo, nuestro llamado es a impedir la aventura de científicos locos, bocudos arlequines mediáticos, generales golpistas robacarros y sabuesos de paraísos fiscales, que quieren volver como candidatos para ser tapaderas de los carteles energéticos, de las mafias de telecomunicaciones, de los delincuentes público-privados y del terrorismo mediático, que cercó la resistencia y quiere cercar la esperanza popular.
De los hechos y de los hechores, ni olvido ni perdón
COFADEH
Tegucigalpa, M.D.C., 1 de mayo de 2024.
¡Viva la clase trabajadora!