Por: Sandra Rodríguez
A dos años del asesinato de la defensora de derechos humanos, Berta Isabel Cáceres Flores, familiares, compañeras, compañeros y amistades realizaron un plantón frente al Ministerio Publico (MP), para exigir justicia y que se capture a los actores intelectuales.
La familia ha entregado solicitudes de información al MP, pero no hay respuesta, por lo que van a llegar hasta la verdad del terrible y doloroso asesinato de Berta y tantas otras Bertitas, Espero que esta vez nos escuchen, afirmó Austraberta Flores, madre de la defensora del pueblo Lenca.
Al cumplirse el segundo aniversario del crimen, la familia continúa exigiendo que se dé con los responsables intelectuales, que el 02 de marzo del 2016, acabaron con la vida de Cáceres Flores en su casa de habitación, situada en la Esperanza, Intibucá.
Hasta el momento del plantón, había ocho capturados como autores materiales, horas después se informó de la detención judicial del primer autor intelectual, Oscar David Castillo Mejía, presidente de la junta directiva de la empresa Desarrollo Energentico S.A. (DESA), en cargada de la construcción de la represa hidroeléctrica “Agua Zarca”, sobre el Río Gualcarque, bien común de la naturaleza que defendía Cáceres, máxima representante del Consejo Cívico de las Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH).
Oscar David Castillo Mejía
Número de Identidad: 0501-1980-06719, ingeniero electricista, casado, hondureño, graduado de la academia militar de West Point en Estados Unidos. Desempeñado, a partir de información pública, los siguientes cargos:
Fue Subteniente de inteligencia militar de las Fuerzas Armadas de Honduras.
Fue Coordinador de Control de Gestión en la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE)
Para la histórica defensora de derechos humanos, Austraberta, las acciones que se han hecho en búsqueda de justicia de su hija se deben al apoyo de organizaciones nacionales e internacionales y los pueblos indígenas del país y del mundo, ya que se ha logrado que el mensaje de Bertita se conozca y que los pueblos se organicen y sobrevivan a los ataques, y así se mantienen de pie ante la dictadura.
“Estos dos años han sido de cargar una cruz dolorosa, pero después de un año me levanté para denunciar a nivel nacional e internacional, no sólo por el asesinato contra Bertita sino por todas las muertes causadas por el régimen”. Austraberta Flores
El Río Gualcarque es parte de los bienes comunes del pueblo indígena lenca, por lo tanto, está amparado en el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que trata sobre los derechos de los pueblos indígenas y tribales.
El responsable de este crimen es el gobierno de Juan Orlando Hernández, afirmó Olivia Marcela Zúniga Cáceres, hija mayor de Bertita, quien acompañó a su abuela Austraberta Flores, cuando leyó un pronunciamiento público, este viernes.
Cáceres Zúniga, agregó que “exigimos la inmediata captura de los autores intelectuales y de la junta directiva de DESA, porque es una Sociedad Anónima, pero tiene una junta directiva y la cancelación de contratos de parte del estado con DESA que le permitió una concesión ilegal e ilícito que violentó el convenio 169 para el proyecto Agua Zarca.
A lo largo de mes seguirán las acciones, detalló la también dirigente de la Coordinadora Indígena del Poder Popular en Honduras (CINPH), ya que, los mismos que asesinaron a Berta Cáceres siguen asesinando al pueblo hondureño.
La exigencia en el marco de justicia para Berta se extiende a pedir libertad para los presos políticos, tema que no es una cosa separada “debe responder el grupo empresarial más duro de este país vinculado a este asesinato”, agregó Olivia Zúniga.
Por su parte, el dirigente social y líder del CINPH, Salvador Zúniga, expuso que, a dos años del asesinado de la Bertita, reconocida con el premio Goldman al medio ambiente 2015, la situación de atentado a los pueblos y al territorio indígena por parte del régimen y por pate de los grupos empresariales que se reparten los bienes comunes naturales del pueblo ha arreciado.
“Continúan las explotaciones y trabajos de construcción de plantas hidroeléctricas. Ahorita los trabajos sobre el río Gualcarque están detenidos, pero están presionando una ley para acelerar los despojos particularmente el agua, la tierra y la minería”.
Estos dos años han sido duros de represión, una situación complicada para la familia de Berta Cáceres, para las hijas, el hijo, la madre, los hermanos, las hermanas, han vivido una situación de zozobra y también de impotencia porque nos hemos encontrado frente a un estado que protege a los asesinaos, que protege a los que manejan los hilos de la vida en este país. Salvador Zúniga.
Carlos H. Reyes y Bertha Oliva de la Convergencia Contra el Continuismo, acompañaron a doña AustraBerta Flores, en la reclamación de Justicia, exigiendo que el crimen contra la defensora hondureña, no quede en la impuidad.
Quienes asesinaron a Berta, la nobel verde el planeta, creyeron que iba a callar su voz, pero se equivocaron, afirmó Oliva, pues ahora su mensaje, su lucha y su vida están presente en cada acción, en cada persona que defiende el planeta y la vida.
«Quienes planificaron la muerte de Berta perdieron porque con el asesinato de ella la inmortalizaron y la universalizaron,y aunque el MP no ha hecho requerimientos fiscales contra los autores inteelctuales, el planeta entero sabe quienes son, y saben porque lo hicieron». Bertha Oliva, que también es la coordinadora del Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH).
A las acciones de protesta también se unieron organizaciones comos «Visitación Padilla», Centro de Estudios de la Mujer (CEM-H), Calidad de Vida, Ecumenicas por el derecho a decidir, Red Nacional de Defensoras, Aci-Participa, Eric-sj, Centro de Estudios de la Mujer (CDM), y otras a nivel nacional.