Tegucigalpa.
Por Sandra Rodríguez
La notificación que hizo pública el jueves pasado a través de un boletín informativo la Sala de lo Penal de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), sobre la absolución de Gladys Lanza, no es la respuesta en demanda de justicia que la entonces coordinadora del movimiento de Mujeres por la Paz “Visitación Padilla” esperó hasta el momento de su deceso el 20 de septiembre del 2016.
Gladys Lanza, la histórica defensora de derechos humanos, a lo largo de su vida se enfrentó a los poderes fácticos y sobrevivió a los más crueles ataques físicos y emocionales sin doblegarse; y sólo hasta después de su muerte, fue sobreseída definitivamente de los cargos que se le imputaban en un juicio donde se le criminalizó por acompañar a una víctima de acoso sexual y laboral.
Estando frente al Tribunal de Justicia, Lanza de 74 años de edad, nunca tuvo entre sus opciones conciliar, pues afirmó que no existía delito por el cual mantenía medidas sustitutivas a la prisión, pese a ser beneficiaria de medidas cautelares de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), y que el Estado de Honduras no pudo cumplir, exponiéndola en “el banquillo de los acusados”.
El documento expresa que “Ante la extinción de la acción penal por la muerte de la coordinadora del movimiento feminista “Visitación Padilla” Gladys Petrona Lanza Ochoa, la Sala de lo Penal de la Corte Suprema de Justicia determinó sobreseerla definitivamente de responsabilidad penal en la causa por el delito de Injurias Constitutivas de Difamación por el cual en fecha 26 de marzo de 2015 la Sala I la condenó a una pena de 1 año 6 meses como resultado de la querella incoada en su contra por parte del Director de la Fundación para el Desarrollo de la Vivienda Social Urbana y Rural (FUNDEVI) Juan Carlos Reyes Flores según hechos ocurridos el 15 de noviembre del año 2010”.
Merly Eguigure, actual coordinadora nacional del Movimiento “Visitación Padilla” también conocido como “Las Chonas, declaró -en febrero- que, tras la muerte de Gladys Lanza, hubo conversaciones con el titular del Poder Judicial, Rolando Argueta, para que se limpiara el nombre de Gladys, pues era lo menos que podía hacer. Por su parte Bertha Oliva, coordinadora general del Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH), organización de la cual Lanza era parte y daba seguimiento al cumplimiento de las Medidas Cautelares, afirmó que la CSJ más bien debería emitir un comunicado pidiendo disculpas por haberla criminalizado.
Las Chonas consideran que la historia juzgará a cada quién por sus actos, así lo expresan en el siguiente comunicado.
Tegucigalpa, Honduras. El Movimiento de Mujeres por la Paz Visitación Padilla, por este medio comunica a su militancia, organizaciones fraternas y ciudadanía en general que en esta fecha hemos recibido a través del apoderado legal, el documento de SOBRESEIMIENTO DEFINITIVO en el caso legal de nuestra querida GLADYS LANZA.
Como recordarán, en marzo de 2015 el poder judicial condenó a Gladys a un año y seis meses de reclusión por considerarla responsable de la comisión del delito de injurias, fallo que más que legal fue político por cuanto en su labor de Defensora, Gladys y nuestra organización acompañaron una denuncia por acoso laboral interpuesta por una mujer, tarea que es nuestra razón de ser.
Gladys falleció esperando que el poder judicial, en un asomo de dignidad, limpiara su nombre y el de Visitación Padilla al presentar un recurso de casación y un escrito de pronta respuesta por su condición de salud y su edad, pero no hubo respuesta alguna. Hoy recibimos esta notificación y no podemos dejar de sentir rabia, impotencia, dolor y tristeza porque la Sala Penal no tuvo la más mínima voluntad para reconocer en GLADYS el esfuerzo colectivo que las mujeres organizadas del país venimos haciendo para demandar justicia y respeto de nuestros derechos humanos.
Que la historia juzgue a cada quien por sus actos.
¡Gladys Lanza vive en cada una de las que seguimos su legado!
Tegucigalpa, M.D.C. 9 de Mayo de 2017