El Comité de Familiares de Detenidos-Desaparecidos en Honduras, Cofadeh, comunica:
En primer lugar, comparecemos en esta plaza para condenar el voto de Honduras en la asamblea general de la ONU contra la decisión de Rusia de defenderse de la OTAN, instrumento violento de Estados Unidos en el territorio de Ukrania.
No aceptamos el falso discurso anti guerra de la política exterior del nuevo gobierno de Xiomara Castro, secuestrado en Bruselas, Ginebra, Washington y Nueva York, por el ex presidente Carlos Flores Facussé.
Honduras no puede continuar bajo ningún pretexto con esta posición fiel de los dictados de Washington, fomentando fobias descomunales, odios raciales y violaciones a cambio de unas libras de gobernabilidad política interna.
El rostro internacional de Honduras no puede seguir en manos de los mismos operadores del crimen organizado cuyo capo principal está encadenado por la justicia penal anti narcótica.
Nos avergüenza que las relaciones políticas, diplomáticas y de derechos humanos en la ONU, la OEA y en la Unión Europea sigan en manos de las y de los ex empleados de ese jefe mafioso que hizo pactos con la cúpula liberal.
La recuperación de la dignidad nacional es una tarea monumental que requiere de gente digna. Ese desafío en un gobierno popular no puede continuar en manos de una diplomacia parasitaria, analfabeta de patriotismo, corrupta y pro guerrerista.
Hoy, afortunadamente, nos motiva celebrar las primeras liberaciones de prisioneros políticos víctimas del golpismo. Eso nos impide la tristeza profunda y nos anima.
La vía del perdón del Estado a través de la amnistía ha comenzado a reconciliar familias humildes de extraordinarios luchadores sociales que sufrían las injusticias del régimen represor de ese reo de Los Cobras y de su estructura criminal.
Nos motiva celebrar también el desmontaje progresivo de los obstáculos al ejercicio de los derechos humanos, de la justicia, el acceso a la información pública y la lucha contra la corrupción.
Animamos a las bancadas dignas de diputadas y diputados a continuar en esta lógica de escucha activa de los clamores populares, sin detener su marcha por las voces de ese Cohep heredero de la dictadura ni de esos pastores corruptos que han bendecido el crimen organizado.
Que la paz no sea la ausencia de la guerra, sino la justicia a los culpables de los hechos atroces, incluida la desaparición forzada de nuestros seres queridos.
De los hechos y de los hechores
Ni Olvido ni Perdón
COFADEH
Tgucigalpa, 4 de marzo de 2022