Clase trabajadora volvió a las calles

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Foto- Giorgio Trucchi

Tegucigalpa, Honduras. – Este 1 de Mayo Día Internacional del Trabajador y la Trabajadora, se desarrollaron multitudinarias manifestaciones celebrando que, en los primero 100 días de gestión gubernamental de la primera presidenta del país, Xiomara Castro, se derogó leyes que violentaron los derechos humanos en los últimos 12 años de narco dictadura.

En los últimos años, las fuerzas represoras del dictador Juan Orlando Hernández -ahora privado de libertad por narcotraficante y a la espera de juicio en la Corte Sur de Nueva York- no permitían que la movilización de la clase obrera concluyera como es costumbre, en la plaza central de Tegucigalpa con la lectura del Manifiesto del 1 de Mayo 2022.

Se pronunciaron las tres centrales sindicales: Central General de Trabajadores (CGT), Central Unitaria de Trabajadores de Honduras (CUTH) y la Central de Trabajadores de Honduras (CTH); el Sindicato de Trabajadores de la Industria de Bebidas y Similares (Stibys), Regional Latinoamericana de la UITA (REL-UITA) y el Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH), lanzaron la campaña “Cinco años diciendo NO. ¡Convenio, YA!”, denunciando la estrategia dilatoria y la actitud intransigente y hostil de Embotelladora La Reyna (PEPSI).

Los rostros de los desaparecidos siempre han estado en las calles junto al pueblo
Los rostros de los desaparecidos siempre han estado en las calles junto al pueblo

Así mismo, no había libertad de movilización y protesta para algunos sindicatos de trabajadores que dependen del Estado, algunos se hacían presentes arriesgando su empleo.

Desde hace una década no se observaba una movilización como la de este año, era innumerable la cantidad de personas gremios y sindicatos que volvieron a las calles celebrando la derogación de la Ley de Empleo por Hora, la Ley de las Zonas de Empleo y Desarrollo Económico (ZEDE), cancelación de pagos por comisiones bancarias, entre otras.

Los dirigentes gubernamentales y políticos caminaron entre el pueblo, la presidenta se unió un año más a la movilización en San Pedro Sula, Cortés.

Entre el ambiente festivo, caminó Fernando Emilio García Rodríguez, comisionado presidencial contra las ZEDE quien afirmó que después de la derogación de la Ley contra las ZEDE “se viene más lucha por la soberanía sobre los recursos naturales, educación, salud, vivienda y no podemos permitir más latrocinio, robo e injusticias”.

Y declaró que los empresarios, socios o consejeros de las ZEDE seguirán la lucha como si no hubiera derogación porque su inversión es millonaria, pero ha valido la pena luchar en cada rincón del pueblo y con el pueblo.

El economista descartó que pueda existir demandas contra el Estado de Honduras, ante la derogación de la Ley ZEDE, ya que ningún Tribunal se va atrever a determinar o aceptar procesos judiciales en contra de la Soberanía de un Estado, porque se estarían en contra 191 Estados o más.

Foto► Giorgio Trucchi
Foto► Giorgio Trucchi

Juan Barahona, diputado del Congreso Nacional afirmó que este día se manifestó un gobierno del pueblo, donde no hubo policías en las calles, tampoco ataques a las protestas, como sucedió años anteriores. El parlamentario fue el proyectista de la derogación de Empleo por Horas y quien mocionó para que se reconozca al líder social y sindicalista Carlos H. Reyes con la mención Gran Cruz de Comendador, homenaje para el cual aun no se define la fecha.

Cerca de Barahona, caminaba Joel Osorio, exigiendo al Gobierno que tome en cuenta a la juventud “no somos apoyados, solo quedamos en el discurso político, queremos que se proyecten en apoyarnos, somos quienes los tenemos donde están”.

Según fuentes oficiales, cerca del 40% de la clase trabajadora en Honduras, está desempleada. El derecho al trabajo es un derecho fundamental y esencial para la realización de otros derechos humanos y constituye una parte inseparable e inherente de la dignidad humana. Toda persona tiene derecho a trabajar para poder vivir con dignidad.