Comayagua.- Del 28 al 30 de octubre se realiza en Comayagua el seminario subregional “Erradicar la violencia laboral es un desafío sindical”.
El encuentro es organizado por el Comité Latinoamericano de Mujeres de la UITA (CLAMU) con el Sindicato de Trabajadores del Instituto Nacional Agrario (Sitraina), y participan unas 50 mujeres trabajadoras con presencia en Guatemala, Costa Rica, Colombia, Perú.
Entré los temas a tratar esta el de la ratificación del Convenio 190 de la OIT sobre erradicación de la violencia laboral.
El Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (Cofadeh) es parte de la actividad, donde la coordinadora general, Berta Oliva, participa como expositora en el panel “Situación socio-política de Honduras y demandas de las organizaciones sociales y populares”.
La intervención de la coordinadora general del Cofadeh se centra, además, en la situación de los derechos humanos en Honduras, con enfoque en el proyecto de Ley Integral de Víctimas de la Doctrina de Seguridad Nacional.
En parte de su participación, la coordinadora del Cofadeh, Berta Oliva, señaló que actualmente no hay una política de estado en contra de los derechos humanos y de los sectores sociales.
«No hemos visto esa política como la que se dio en la época de los años 80s, en la del 2009 y todo lo que se dio en el golpe de Estado y todas las manifestaciones que se dieron en el tema de la salud y la educación», sostuvo Oliva.
Señaló, además, que «Honduras vivió su propio holocausto, lo que pasa que en nuestro país el miedo fue tanto que, inclusive, las víctimas preferían callar, porque la tortura de eso se trata, que la gente no diga por temor a que les pueda pasar algo y en los 80s estaba clarísimo».
«Desafiamos el terror, pero no ha sido fácil, hemos pasado de todo cuando escucho esos 51 años del SITRAINA, nosotros nos fuimos incorporado a esa dinámica someramente, porque no se cuenta a profundidad lo que vive cada comunidad», señaló la defensora de derechos humanos.
«En ese marco de las políticas, en los ochentas enfrentamos la política criminal de estado; en el golpe enfrentamos una política criminal feroz, que ahora como que la estamos olvidando. Y hay una sociedad dañada después de la dictadura», finalizó.