Tegucigalpa.
Riccy Ponce
La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH), presentó su informe basado en la crisis política en el país denominado “Las violaciones a los derechos humanos en el contexto de las elecciones de 2017 en Honduras”, donde resalta las diferentes violaciones de derechos humanos y crímenes de lesa humanidad generados por la crisis post electoral, causados por la dictadura de Juan Orlando Hernández.
Ante esto la coordinadora del Comité De Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH), Berta Oliva, expresó que el informe de la Oficina del Alto Comisionado dado a conocer esta semana viene a confirmar el clamor, el grito de la población hondureña en General.
“Es un informe donde tendrá que repensar el régimen actual para tratar de descalificar el resultado de los mismos, lo que allí se dice y es porque cuando uno conoce y mira los procedimientos a seguir, antes de hacer público los resultados, no pudieron cambiar mucho porque estaban sustentados”, señaló la coordinadora del Cofadeh.
Asimismo sostuvo que “está altamente documentado lo que allí se dice, está altamente probado, el régimen en este caso lo ha tenido que leer ha tenido que aprobarlo. Me imagino que querían que saliera como ellos querían, pero el problema es que estamos ante una realidad irrefutable como es el asesinato de personas por oponerse a la dictadura y al fraude electoral que se generó el pasado 26 de noviembre y esa verdad es que no van a poder cambiar la historia, como es el tema de los asesinados, criminalizados, detenidos, presos y exiliados políticos”.
La coordinadora del COFADEH agregó que “es claro que el calificativo de presos político y exiliados políticos no es el régimen en este caso que lo va a colocar como tal, es la sociedad y somos las familias, las organizaciones, porque cada caso que miramos es un caso de pura persecución política, que se ha emprendido por oponerse a los resultados fraudulentos del 26 de noviembre”.
Para la Oliva el informe es una herramienta valiosísima que viene por lo menos a ratificar lo que ha venido denunciando el COFADEH y las demás organizaciones, que en medio de la barbarie se es estuvo trabajando para dar a conocer y decir alto, paren, no sigan poniendo en mal al país.
“Cómo es posible que desde las estructuras del estado estén hablando que hay un interés y una línea por el respeto a los derechos humanos, como es posible que se diga eso cuando los resultados que tenemos están allí, en cifras los muertos y en cifras los presos políticos”, añadió la defensora de derechos humanos.
También dijo a defensoresenlinea.com que “creo que los opresores en este momento se ha de reír por los informe tanto que estamos dando las organizaciones de derechos humanos como el Alto Comisionado de las Naciones Unidas, porque es mínimo comparado a lo que ellos saben que han cometido. El tema aquí es que nosotros no podemos colocar datos ni hechos si no están altamente probados, y ese es la gran diferencia entre los que hacemos un trabajo de derechos humanos”.
Pero también los represores han de estar bastante preocupados por la sencilla razón que aquí hay un organismo internacional que está monitoreando y contando que ya no es lo mismo que lo diga COFADEH, no es lo mismo que lo diga la Coalición Contra la Impunidad a que lo diga un organismo de alzada de esta altura como lo es el Alto Comisionado de las Naciones Unidas, comentó Berta Oliva.
Es realmente un documento que a mi juicio que en la coyuntura actual requiere de enorme importancia en materia de demanda para la exigibilidad del cumplimiento de los derechos humanos y esto exhibe entonces al régimen y a sus represores, como lo que son, finalizo la coordinadora del COFADEH.
En uno de los apartados del informe de la OACNUDH se lee que “El análisis realizado por la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Honduras (OACNUDH), revela que la respuesta del Estado a las protestas post electorales dio lugar a graves violaciones a los derechos humanos. Sobre la base de su observación, la OACNUDH considera que elementos de las fuerzas de seguridad, especialmente la Policía Militar del Orden Público y el Ejército, utilizaron una fuerza excesiva para controlar y dispersar las protestas, incluso fuerza letal, lo que provocó muerte y heridas de manifestantes y transeúntes.
Asimismo señala que al momento de finalización de este informe, el 27 de enero, la OACNUDH registró que al menos 23 personas resultaron muertas en el contexto de las protestas postelectorales, entre ellas 22 civiles y un agente de policía. Sobre la base de su observación, la OACNUDH considera que al menos 16 de las víctimas murieron violentamente a causa de disparos efectuados por las fuerzas de seguridad, entre ellas dos mujeres y dos niños, y que al menos 60 personas habían resultado heridas, la mitad de ellas como consecuencia del uso de armas de fuego.