Tegucigalpa.- La desaparición forzada en Honduras es un crimen de lesa humanidad que continua vigente, y desde que inició la pandemia se ha dado con mayor intensidad, a pesar que el régimen hondureño suspendió las garantías constitucionales para evitar la propagación del Covid-19 y aprovechó la emergencia nacional para nuevamente sacar a sus fuerzas represoras a la calle, no a cuidar a la población si no a reprimirla, ante cualquier reclamación y exigencia del pueblo.
El Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH) registra más de 15 personas desaparecidas en pandemia, y en algunas de estás desapariciones se involucra directamente elementos policiales, tal es el caso de Osman Daniel Vásquez Martínez, hijo de la reconocida defensora de la tierra y el territorio y comunicadora social Susana Vásquez, en el departamento de La Paz, quien despareció el 27 de julio de 2020.
“Mi hijo despareció el 27 de julio de 2020 y puse las denuncias, fui a la posta policial y no me atendieron en Márcala, el 30 de julio recibí un video donde mi hijo lo estaban subiendo a una patrulla con registro PN-089”, señaló la defensora.
Susana, al ver que no le aceptaban la denuncia y que su hijo seguía sin aparecer, acudió al COFADEH a denunciar la desaparición de su hijo, organización que de inmediato interpuso un habeas corpus ante la Sala Constitucional de la Corte Suprema de Justicia en Tegucigalpa, seguidamente envió una acción urgente al Grupo de Trabajo contra las Desapariciones Forzadas de Naciones Unidas, ubicado en Ginebra, Suiza.
La defensora está segura que gracias a las acciones y denuncias del COFADEH, para lograr dar con el paradero de su hijo, es en el mes de abril, varios meses después, recibió la visita de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC).
“Lo último que sé es que en abril de este año vino una comisión de la ATIC a la comunidad para que yo les diera una declaración para seguir las investigaciones”, indicó.
Asimismo señaló que “no tengo respuestas, sigo esperando todavía, no he sabido nada más de él, y yo digo que las acciones realizadas están a nivel internacional”.
“Se puso primero un habeas corpus, se estuvo investigando en Marcala, mucha gente me dice que pudiera estar preso, pero a mí me dijeron que se había descartado la posibilidad, pero mucha gente me dice que sí, porque no he ido a los centros penales a hacer investigación”, señaló.
Desde el momento de su desaparición el 28 de julio no se supo nada de él, más lo que aparece en un video que lo están subiendo en una patrulla policial, prácticamente inconsciente, frente a la alcaldía de Marcala. Osman vestía una camiseta verde claro, con jeas azul, botas de hule color negro.
Al menos 17 casos de desapariciones ha registrado el COFADEH desde que inició el confinamiento para evitar la propagación del COVID-19, en este contexto el país permanece militarizado y hasta noviembre de 2020 con movilización restringida.