A un mes de la trágica muerte de la defensora de la tierra y territorio Yessenia Padilla Orellana

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Tegucigalpa.- Hoy se cumple un mes del fallecimiento trágico de la defensora de los derechos humanos, de la tierra y territorio del departamento de La Paz, Yessenia Yamileth Padilla Orellana.

Yessenia era socia de la base campesina “8 de febrero” de la comunidad de Lepaguare, San Pedro de Tutule, La Paz, y miembra activa de la Red de Defensores de Derechos Humanos Indígena Lenca de La Paz (REDHIL–PAZ).

Ella falleció en un accidente de tránsito el 11 de mayo, cuando junto al defensor de la tierra y territorio, Omar Maradiaga, se conducían en motocicleta para participar en una jornada de formación que les impartiría la Central Nacional de Trabajadores del Campo (CNTC).

Yessenia Padilla muestra bombas lacrimógenas que les lanzaron durante un desalojo violento en la Base Campesina 8 de febrero
Yessenia Padilla muestra bombas lacrimógenas que les lanzaron durante un desalojo violento en la Base Campesina 8 de febrero

En el 2017, Yessenia, junto a sus  compañeros de la Base Campesina 8 de febrero, Luis Alonso Tejeda Orellana y Arturo Salinas Orellana, fueron acusados del delito de usurpación de tierras.

El Tribunal de Sentencias de la ciudad de Comayagua la condenó por el delito de usurpación, y el Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (Cofadeh), quien se constituyó como defensor privado, solicitó la suspensión de la pena, con esto se suspendía los efectos de una sentencia condenatoria consistentes en relación al antecedente penal, pues la misma no se plasmaba en el sistema, también no se suspendían sus derechos civiles.

La persecución judicial no le impidió que siempre se estuviera solidarizando con otros compañeros privados de libertad o llevados a los tribunales de justicia en La Paz o en departamento de Comayagua.

Su compañero de vida, Nulman Maradiaga, también criminalizado, se vio obligados a abandonar el país para vivir en el exilio, con el fin de salvaguarda su vida.

Como integrante de la REDHIL-PAZ, Yessenia fue una mujer activa, beligerante, formada y organizada.

“Fue una luchadora incansable defensora de los derechos humanos, de tierra y territorio indígena campesino lenca en el departamento de La Paz”, recordó Margarita Pineda integrante de la REDHIL–PAZ, quien en este proceso de lucha y formación compartió varios momentos con Yessenia.

Asimismo manifestó que con Yessenia, así como con otros compañeros de diferentes organizaciones aglutinados en el proyecto de defensoría de la REDHIL-PAZ, participaron en diferentes acciones de protestas, caminatas, conferencias de prensas, acompañamientos en los tribunales a compañeros campesinos y campesinas judicializados para lograr su liberación.

En las acciones de toma de carretera para parar la deforestación que se hace en esa zona, Yessenia fue muy activa, señaló Margarita Pineda.

También recordó que a Yessenia la conoció en el 2015 junto a su esposo Nulman, en las jornadas de capacitación, donde siempre andaban juntos en la lucha de defensa de la tierra y territorio.

“Como familias ellos estaban unidos en la lucha, pero lamentablemente Nulman tuvo que migrar del país por varias situaciones y esta es una pérdida irreparable para la familia como para las organizaciones que trabajamos en la defensoría”, señaló.

Indicó que a Yessenia siempre se le recordará como una mujer amable, responsable, luchadora, incansable por el bien de los compañeros y compañeras indígenas del departamento de La Paz.

Para la defensora Tesla García el fallecimiento de Yessenia ha dejado un vacío en la lucha de la defensa de los derechos humanos, la tierra y territorio.

“Fue una mujer defensora de los derechos humanos empoderada por el Cofadeh en la REDHIL-PAZ, una mujer de lucha que nunca claudicó, donde siempre estuvo al frente en la lucha por la recuperación de la tierra en la Base Campesina 8 de febrero”, señaló García.

Recordó que Yessenia siempre estuvo presente en toda lucha y que además siempre estuvo formándose cada día para llevar ese conocimiento a cada uno de la base campesina a la que pertenecía.

En el proceso de recuperación de tierra, Yessenia Padilla fue una de las tres mujeres de la Base Campesina 8 de febrero, que en el 2018 tuvieron orden de captura. Esto las obligó a no salir del sector y si lo hacía tenían que esquivar los retenes policiales, porque eran constantemente buscadas por la policía, quienes en varias ocasiones acudieron a su vivienda para llevársela detenida.

“Solo por recuperar tierra nos anda persiguiendo la policía a nosotros. No nos están dejando trabajar la tierra, porque ahí trabajamos para sobrevivir nosotros”, señaló en su oportunidad a defensoresenlinea.com Yessenia Padilla.

Yessenia, además participó en todos los procesos de formación que el Cofadeh dio a los defensores y defensoras de La Paz, para la defensa de los derechos humanos, de la tierra y territorio.