Giorgio Trucchi I Rel-UITA
El próximo Primero de Mayo, el pueblo organizado hondureño volverá a las calles en un momento clave para el país, en el cual las fuerzas oscuras, herencia de la narcodictadura, pretenden minar las elecciones generales de noviembre próximo. Las tres centrales (CTH, CGT, CUTH) y el Frente de Resistencia (FNRP) dan a conocer su Manifiesto para esta histórica fecha.
“El hecho de que cada cuatro años tengamos elecciones no significa que vivamos en democracia”, asegura el documento. “No puede haber democracia en un país donde la riqueza y el ingreso se concentran en una minoría oligárquica desnacionalizada, que tiene un enorme poder político y que está por encima del poder constitucional, mientras la gran mayoría de la población es pobre o indigente”, continúan. Una oligarquía, aseguran las centrales y el frente de resistencia, cuyo objetivo no es generar empleo, sino explotar el trabajo para obtener ganancias y enriquecerse.
“Tampoco es democrático un país donde la propiedad de la tierra se concentra en pocas manos, donde se privilegian los monocultivos para la exportación, en detrimento del desarrollo de las fuerzas productivas para la producción de alimentos para el pueblo”, recuerdan.
En este sentido, los firmantes del Manifiesto del Primero de Mayo proponen una estrategia fluida de comunicación del gobierno con la sociedad, especialmente con los sectores populares organizados que han estado planteando sus propias reivindicaciones.
“Una propuesta transformadora, como la que impulsa la presidenta Xiomara Castro, sólo se puede alcanzar con una mirada estratégica de futuro y en plena coordinación con los movimientos sociales”.
De aquí surge el llamado a lograr mayores niveles de unidad, de organización y de articulación con el movimiento social y popular hondureño, al tiempo que rechazan los nuevos intentos de los sectores más conservadores del poder legislativo de aprobar leyes que precarizan aún más el trabajo.
“Pretenden seguir desregularizando el mercado laboral, sustituyendo directamente o tercerizando el trabajo permanente por el temporal, para generar enormes ganancias adicionales al gran capital”.
También saludan a los que luchan incansablemente por el rescate de los bienes comunes privatizados por la narcodictadura, al tiempo que exigen castigo para los asesinos de las y los defensores de la tierra, los territorios y los bienes comunes.
Asimismo, vuelven a pedir al gobierno pasos decididos para el desmontaje de la estructura dictatorial y el sistema de impunidad heredado de la narcodictadura, así como en materia de derechos humanos, laborales, transparencia y justicia, fortalecimiento institucional.
De la misma manera, vuelven a plantear la construcción consensuada de un plan nacional de desarrollo que apunte, entre otros, a generar empleo, mejorar salud, educación, seguridad social, impulsar una reforma agraria integral, garantizar los derechos territoriales y ancestrales.
“A 139 años del sacrificio de los mártires de Chicago y a los 71 años de la huelga del 54, rendimos nuestro más sentido homenaje a quienes protagonizaron tan gloriosos acontecimientos.
Proclamamos la necesidad de que sólo unidos y movilizados podemos hacer frente a las políticas neoliberales impuestas por la dictadura del capital, luchando a la par por recuperar las conquistas perdidas y lograr los cambios estructurales que nuestro país necesita”, concluye el documento.