“Con cada ser humanos que perdemos algo se nos va”, hasta siempre Normanda Martínez

0
904

Tegucigalpa.- Junto con el atardecer y la lluvia fresca fueron sepultados los restos de  Normanda Martínez, incansable luchadora social y defensora de la vida, ex presidenta del Colegio de Educación Media de Honduras (COPEMH), e integrante del partido morazanista de Honduras y la Convergencia Contra el Continuismos, espacios desde la que luchó incansablemente  contra de las injusticias de este país.

La profesora Normanda, como la conocían y la recordaran muchos,  además de su labor  en la lucha social, fue sepultada en La Venta, Francisco Morazán, hasta a donde llegaron sus familiares y amigos más cercanos, con quienes luchó hombro a hombro por una Honduras mejor, quienes no dejaron de  reconocer  sus esfuerzos  y su lucha  por  un país  mejor.

Entierro Normanda 2Para Mario Membreño,  la muerte de Normanda  es algo que  ha conmovido, no nos  podemos acostumbrar todavía,  la pérdida de seres queridos, y Normanda fue una  compañera de lucha   en diferentes espacios, fue primero en COPEMH, del que fue presidenta,  lo fue  en las mujeres socialistas que viene realizando una labor sistemática de trabajo con ese sector tan importante de la sociedad hondureña, lo fue también en la Convergencia, donde  desde hace días nos ha hecho mucha falta.

Señaló que al ser una persona con bastante claridad respecto al trabajo que  la Convergencia viene desarrollando desde su fundación, y lo es también para nuestra organización, el partido de la Revolución Morazanista, el quiere rescatar  a la  Normanda docente, que trabajó  en  la Universidad Nacional Autónoma de Honduras,(UNAH) y en la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán (UPNFM), porque era el campo fuerte de ella, las letras.

“Hay que recordar que sacó su maestría en Colombia, donde se formaron muchos  profesionales de la educación en su generación, y  fue una magnifica docente, la recordaran siempre sus ex alumnos porque  para la docencia hay algo que es importante, la condición humana  y esa condición en Normanda se hizo sentir siempre; allí donde activó de alguna manera y no se puede ejercer la docencia  sin una condición humana, sencilla, noble y con miras claras”.

“Normanda tuvo esas cualidades, así que es una pérdida también para el magisterio hondureño, para los colegios profesionales de este gremio, una pérdida que en lo personal lamento profundamente porque compartí con ella muchas de las experiencias más importantes en todo estos campos que le he mencionado, y con su sencillez, pero  con si sinceridad ayudó siempre a que las cosas marcharan cada vez mejor,  así que nos duele mucho está pérdida”, agregó Membreño.

Terminó diciendo que no quiere decir lo que todos dicen que es una gran pérdida, porque  todo ser humano es singular “como decía un poeta, la muerte de todos humano nos disminuye, algo se nos  va”.

Entierro Normanda 1“Hablar de Normanda es hablar de  entrega, de sencillez, de humildad, de constancia, una mujer que nunca, nunca, dejó de luchar, siempre estaba allí,  para quien la necesitara, ella tenía un carácter muy fuerte y era directa, cuando daba una opinión la daba de forma directa, y regañaba”, expresó  Dirían Pereira, compañera y amiga cercana.

“Siempre nos estaba formando, siempre tenía una  frase para formarnos, para ubicarnos en el espacio en el que estuviéramos, ya sea personal o político, ella siempre estaba allí, puntualizando y con ella  desarrollamos una amistad muy fuerte  los últimos años”, añadió.

Además, Carlos Zúñiga, maestro jubilado y amigo cercano, señaló que con Normanda se conocen desde la década de los 70,  en una época donde ambos fueron dirigentes magisteriales.

“En ese momento enfrentamos  situaciones complicadas frente al  gobierno que quiso asaltar los gremios, y luego seguimos trabajando a tal grado que ahora impulsábamos junto a personalidades que  tiene muy larga trayectoria revolucionaria, el proyecto del partido de La Revolución  Morazanita”.

Por su parte Edwin Hernández, presidente del Colegio de Pedagogos de Honduras (Colpedagogosh) e integrante de la  CCC, señaló que duele tener que sembrar a una revolucionaria, y no nada más  revolucionaria  por lectura ni por literatura, si no que de práctica.

“Conocimos a Normanda  en sus tiempos de presidenta  en COPEMH, de allí fuimos acercando  esa relación que pasó inclusive como miembro del  partido comunista, Marchista de Honduras,  allá afínales de los 70 y a principios de los ochentas compartimos alegremente nuestro trabajo, tanto en el partido de la Revolución Morazansta, pero especialmente en la Convergencia  Contra el Continuismo; era una persona clave para nosotros, por las tareas que se le habían asignado”.

“Hoy nos toca sembrarla, la sembramos con nostalgia, la sembramos con dolor, pero con la esperanza que más Normandas nazcan en el país, que nos den el espíritu de lucha que nos daba Normanda, y sobre todo  que nos pegara  aquellas regañadas cuando nos atrasábamos  en el trabajo, o cuando no estábamos haciendo las cosas bien, esa era Normanda, esa es la Normanda que hoy nos deja, solo nos resta levantar su bandera, levantar su legado y hacer lo  que  corresponde en el proceso de lucha”, añadió.

Normanda Martínez  falleció el 20 de octubre de 2021 en horas de la mañana en Tegucigalpa, pero sin duda el país perdió una valiosa mujer con grandes aportes para la sociedad hondureña.