Tegucigalpa.- Más de 35 organizaciones aglutinadas en la Convergencia contra el Continuismo (CCC), plataformas ciudadanas que rechazan la instalación de las Zonas de Empleo y Desarrollo Económico (ZEDES) y diversos colectivos regionales, se movilizaron el pasado 30 de agosto, para demandar la salida del poder de Juan Orlando Hernández, condenar la venta del país y exigir el respeto de los derechos humanos.
Las nutridas movilizaciones, plantones y manifestaciones se produjeron en la capital de la República, y en ciudades como Tocoa (Colón), El Progreso (Yoro), Roatán (Islas de la Bahía), La Ceiba (Atlántida) y La Campa (Lempira), entre otras regiones del país.
Las protestas ciudadanas se llevaron a cabo el lunes 30 de agosto, fecha que el calendario nacional conmemora como el Día Nacional del Detenido Desaparecido y Día Internacional de las Víctimas de la Desaparición Forzada. Una iniciativa hecha realidad gracias a la incidencia política del Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH).
Desde el año 2002, mediante decreto 284-2002 aprobado por el Poder Legislativo, en Honduras se conmemora el Día Nacional del Detenido Desaparecido, como un aporte a la memoria histórica y al reconocimiento a las víctimas y a sus familiares, que fueron afectados por la aplicación de la Doctrina de Seguridad Nacional implantada en Honduras por Estados Unidos para perseguir y aniquilar liderazgos sociales que demandaban la democratización del país.
Previo a estas actividades, integrantes de la Coordinación Nacional de la Convergencia contra el Continuismo (CCC) comparecieron en el programa radial “Voces contra el Olvido”, espacio producido por el COFADEH y que se transmite todos los sábados de 7:00 a 8:00 de la noche por la cadena Radio Globo.
En este espacio el destacado líder sindical Carlos H. Reyes, advirtió que el pueblo no debe permitir la fragmentación del país a través de las ZEDES. En tanto, el presidente del Colegio de Pedagogos de Honduras (Colpedagogosh), Edwin Hernández, manifestó que el pueblo se moviliza para demostrar a la narco-dictadura que hay un pueblo sediento de defender los derechos humanos y la soberanía patria.
También la reconocida defensora de los derechos humanos y Coordinadora General del COFADEH, Bertha Oliva, dijo que Honduras está en agonía y al borde de la muerte. Oliva instó a oficiales patriotas y de alto rango de las Fuerzas Armadas (FFAA) a que cumplan con su mandato de proteger la soberanía nacional.
El líder sindical y miembro de la coordinación nacional de la CCC, Carlos H. Reyes expuso que las protestas llevan como objetivo presentar denuncias del pueblo, repasar la historia y mantener la memoria histórica sobre las desapariciones forzadas que fueron cometidas por escuadrones de la muerte en la década de los años ochenta.
Otro aspecto relacionado con la soberanía popular tiene que ver con el proceso electoral, dijo Reyes. “De lo que se trata es que se respete esa soberanía popular en el próximo proceso electoral y que se deje ya de estar haciendo tanta maniobra para evitar las mismas, o para seguir haciendo fraudes que son una vergüenza para Honduras”.
El reconocido dirigente sindical añadió que “lo más vergonzoso que nos ha estado pasando es el caso de las ZEDES, que es una situación muy peligrosa para los hondureños porque definitivamente ya estamos viendo cómo se va a descuartizar el país, y en cada uno de esos pedazos; aunque lo diga la propaganda oficial que nos cierto, va a ser un estado dentro de otro estado”.
Reyes dijo que la propaganda del régimen es mentirosa cuando expresa que lo fundamental es que con las ZEDES va a haber empleo para todos los desempleados de Honduras, lo cual es totalmente falso.
“Además no es cierto que los capitalistas, ya sean nacionales o extranjeros, invierten para dar empleo, esa es la peor chabacanada que pueden decir. El capitalista invierte para explotar el trabajo asalariado, para obtener ganancias. Y no es cierto también el hecho que con esto, se va a desarrollar Honduras, es mentira. Lo que se va a desarrollar son las empresas que se instalen en esos territorios que nos roben”, advirtió el dirigente sindical.
Reyes dijo que incluso se van a desarrollar empresas ilícitas, “porque ya se habla que ahí será un centro para la narco-actividad y no sabemos exactamente si eso tiene que ver en alguna medida con lo que se ha encontrado en Roatán (cuando se confiscó un carro cisterna con más de 2 mil kilos de cocaína y se detuvo a 4 personas, entre ellas al alcalde de dicha ciudad Jerry Hinds acusado por la fiscalía de tráfico de drogas agravado)”.
Es sumamente peligroso y delicado lo que está pasando en el país y lo que se nos viene, con un proceso electoral muy difícil, así como la situación económica, social y política en que está sumergida esta patria, junto a la pobreza, el desempleo, la ignorancia, la insalubridad y tanto desastre que tenemos. Nunca el país había estado en tal situación, sostuvo Carlos H. Reyes.
Por su parte la Coordinadora General del Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH), Bertha Oliva, expresó en el programa radial Voces contra el Olvido, que Honduras está en agonía y al borde de la muerte.
Oliva dijo que Honduras ha sangrado tanto con las heridas que le han venido zarpando los violadores de derechos humanos, por lo que hay que tratar de salir y agitarnos. Los hondureños tenemos realmente conciencia y conocimiento de lo que significa la venta de la soberanía y la violación a los derechos humanos.
En su intervención, el presidente del Colegio de Pedagogos de Honduras (Colpedagogosh), Edwin Hernández, miembro de la coordinación nacional de la CCC, señaló que “nos movilizamos para demostrar a la narco-dictadura que hay un pueblo sediento de defender los derechos humanos y la soberanía patria. Un hecho singular para esta semana es el retorno al país de la doctora Ligia Ramos quien nunca tuvo que haberse ido del país pero que debido a las amenazas de los cuerpos represivos del estado, la obligaron a estar fuera”.
Al respecto y en conferencia, la doctora Ramos expuso que “si algo me pasa a mí o a mis hijos, es el gobierno narco-corrupto, es el gobierno de Juan Orlando Hernández y sus funcionarios públicos y la inteligencia militar; la que tiene la responsabilidad de lo que a mí me pase”.
Hernández explicó que son muchas las reclamaciones del pueblo en los actuales momentos y que la primera exigencia es que se respete la vida, que se respete el derecho al agua, el derecho a los territorios ancestrales.
El presidente del Colpedagogosh recalcó que Honduras es el primer país que está perdiendo territorio a causa de las ZEDES.
Por otro lado, añadió, los trabajadores exigen que se respeten los derechos laborales, mientras que “los compañeros del Aguán están exigiendo la liberación de los 8 compañeros defensores de los ríos Guapinol y San Pedro frente a la explotación minera, y a quienes el régimen los mantiene privados de libertad.
Hoy más que nunca está vigente el legado de Tomás Nativí: “En las calles está el poder”, y es en las calles donde debemos de manifestarnos en contra de los abusos de la narco-dictadura, apuntó.
Para la Convergencia contra el Continuismo (CCC), cada 30 de agosto está definido en agenda como una fecha de actividades de denuncia y reclamación con el propósito de recordar que Honduras no vive bajo un estado de derecho, si no bajo un régimen inconstitucional, usurpador del poder y con nexos con el narcotráfico y la corrupción.
Refiriéndose a la memoria histórica, Bertha Oliva dijo que no es cierto que el pueblo hondureño y la ciudadanía está de acuerdo con la violación a la soberanía y con la violación permanente a los derechos humanos y que condena las desapariciones forzadas por razones políticas, de las cuales el estado de Honduras tiene que responder y aclarar.
Oliva indicó que hablar con las diferentes expresiones sociales del país es altamente dignificante para nosotras y es por esa razón que caminamos, nos mantenemos y vamos a detener el derramamiento de sangre en nuestra patria; porque ella está herida.
Con estas movilizaciones debemos manifestar a los mercaderes nacionales e internacionales, que nuestra patria no está en venta. “Este es el inicio para demostrar masivamente que estamos indignados e indignadas con la pretensión que se está llevando a cabo en algunos lugares de instalar ZEDES en nuestro país”, sostuvo la Coordinadora General del COFADEH.
Al tiempo que expresó: “Que sepan que estamos indignadas por todo ese abuso disfrazado de legalidad, utilizando el sistema de justicia contra los compañeros de Guapinol. Condenamos y rechazamos ese acto categóricamente y se están exhibiendo como lo peor. Que entiendan que estamos molestas por lo que les han hecho a los compañeros de Reitoca que defienden el río Petacón”.
Que sepan que estamos indignadas por lo que están habiendo en Cuaca, Olancho, lo que están haciendo en Santa Bárbara. Estamos indignadas por los altos grados de inseguridad y por la continuación del despojo de los territorios, acotó.
“Que sepan que sabemos que están utilizando todo el sistema para intimidar, para acallar y para someter a la población. Por otro lado nos gustaría ver y escuchar a algún militar de alto rango de los que tienen el poder, decir: ¡No vamos a permitir una violación más a la patria y a la soberanía!.
Queremos escuchar que digan que no van a utilizar las armas en contra de los que nos manifestamos. Que no usen el sistema judicial para acusarnos, estigmatizarnos, criminalizarnos y judicializarnos.
Ellos (los militares) tienen mandatos específicos de cuidar la soberanía, de resguardar el territorio. De exigir y ejercer acciones encaminadas a respetar la Constitución de la República y hasta hoy no lo han hecho, pero todavía hay tiempo para hacerlo. Salgan de la comodidad de las unidades militares, pero no para hacer acciones en contra del pueblo que se manifiesta, si no, en contra de los vende patria. En contra de esos mercaderes sin escrúpulos que están entregando nuestro país, porque de lo contrario estaremos muy pronto a desaparecer, sostuvo Bertha Oliva.
La CCC anunció que en septiembre proseguirán las movilizaciones, ya que el pueblo está harto de tanta impunidad, de los altos niveles de corrupción, y de todos los abusos cometidos por la actual narco-dictadura.
