En la memoria los jóvenes del Guasaule

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Nohemí Pérez, hemana de Samuel y co-fundadora del COFADEH

Por: Sandra Rodríguez


Tegucigalpa, Honduras.- ¿Qué significa un hermano? Para la defensora de derechos humanos  Nohemí Pérez, representa vida, amor, un amigo y apoyo incondicional.

Y ¿un hermano desaparecido? Su semblante cambió y con un tono de voz pausado expresó que, un hermano detenido desaparecido es tristeza, esperanza, impunidad y dolor.

Este contraste de significados lo compartió con Defensores en Línea, al cumplirse 38 años de la detención y desaparición forzada de su hermano Samuel Pérez Borjas junto a Enrique López Hernández “Quique”, Julio César Méndez y María Ediltrudiz Montes “Tuy”, cuando ingresaban a Honduras por la frontera de El Guasaule, que conecta con Nicaragua el 24 de enero de 1982.

Las víctimas ya estuvieran cerca de los 60 años, pero el tiempo sin justicia los mantiene jóvenes en la mente y memoria de familiares y amistades, pese a que no existe una tumba donde colocarles flores, se les honra con la lucha y el ejemplo que dejaron estos cuatro soñadores con un país mejor.

La población hondureña iniciaba una década de dolor, terror y dictadura vestida de democracia, bajo regímenes militares, injerencia extranjera y la Doctrina de Seguridad Nacional (DSN) en complicidad con el gobierno de los Estados Unidos.

La década de 1980 dejó al menos 184 detenidos desaparecidos por razones políticas. En ese contexto 12 familias convocadas por el dolor y el deseo de reencontrase con sus seres queridos fundaron el Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH), el 30 de noviembre de 1982.

No ha sido fácil sobrevivir -continuó Nohemí- una de las fundadoras del Comité, porque hoy Samuel cumple 38 años de desaparecido y se siente como que fue ayer.

Cabe señalar que, Samuel, Quique, Julio y Tuy venían de una formación política en Cuba, vía terrestre desde Costa Rica. Al intentar ingresar a Honduras por la frontera en Choluteca, fueron interceptados, secuestrados y desaparecidos por agentes de la Dirección Nacional del Investigación (DNI).

“No volvimos a saber nada de ellos, como familia los mantenemos presentes. Samuel vive por sus principios y compromiso como hijo, hermano, tío y compañero,  para rescatar este país hundido en la miseria, impunidad y corrupción. Ésto lo llevó a ser parte de más de un centenar de personas desaparecidas por sus ideales, pero que siguen presentes porque quienes hoy los recordamos sabemos que su lucha inclaudicable”.

Nohemí Pérez, en la recepción del COFADEH
Nohemí Pérez, en la recepción del COFADEH

Para las familias de los cuatro jóvenes desaparecidos en el Guasaule, hoy es un día muy triste. Nohemí llamará a doña Liduvina Hernández, madre de Quique y presidenta del COFADEH; y también se comunicará con doña Natalia Méndez “Tala”, madre de Julio.

«Es una forma de conectarnos e identificarnos en este día triste, lo siento opaco, pero lo hago con cariño, amor y respeto, porque como madres para ellas no es una fecha especial», afirmó la defensora y víctima de la Doctrina de Seguridad Nacional.

Nohemí desde los 14 años asumió la búsqueda de Samuel, en su mente queda el nombre de su madre Fidelina Borjas (fallecida en 2009);  y la mamá de Tuy, Lucila Girón (fallecida en 2014). Con ellas ya no hay llamadas telefónicas, sino la esperanza que, si no llega la justicia terrenal, los asesinos y torturadores serán juzgados en otra vida.

“Nuestra memoria pregunta ¿Cómo ha pasado el tiempo y no se ha hecho nada en los casos de detenidos desaparecidos? Pienso que nuestra organización COFADEH, es la única que levanta la bandera de lucha en el caso de desaparición forzada y las violaciones a derechos humanos”. Nohemí Pérez, hermana de Samuel, Detenido Desaparecido en 1982.

Afirmó que, Samuel dejó un ejemplo de lucha y las familias están tristes, porque es un sentimiento compartido. Todas las familias extrañamos a nuestros seres queridos, hoy no están celebrando la desaparición, sino recordando que quienes los desaparecieron no han pagado por lo que han hecho.

Entre los deudores de justicia están los agentes del Estado: Juan Blas Salazar, Alexander Hernández, Juan López Grijalva, Billy Joya, Gustavo Álvarez Martínez, el presidente de Honduras (1982-1986) Roberto Suazo Córdova y quienes idearon la Doctrina de Seguridad Nacional.

Las consecuencias de la desaparición forzada no han cambiado, estas dejaron desintegración y miedo en las familias y amigos.

Hubo quienes se alejaron de nosotras por miedo, lamentó Nohemí. Nos señalaban diciendo que nuestros familiares eran terroristas, que en Honduras no había desaparecidos, y fue así que, las madres de “los Pañuelos Blancos” como se le conoce a las progenitoras de los detenidos desaparecidos, rompieron el cerco mediático y militar.

Mientras que la indiferencia del Estado por estos hechos, era palpable, no hubo ni existe investigación de los crímenes de lesa humanidad,  “es triste que en estas cuatro décadas de búsqueda por nuestros detenidos desaparecidos no ha habido interés de investigación; si bien nos aumenta la frustración, también nos hace más fuertes para mantener la lucha y el grito NI OLVIDO NI PERDÓN ”.

planton 2017
Doña Liduvina, sentada entre familiares de detenidos desaparecidos en un plantón del año 2017,  en la Plaza Los Desaparecidos, Tegucigalpa. 

Una de las acciones en  las que el COFADEH mantiene la Memoria Colectiva, son los plantones del primer viernes de cada mes en la Plaza Los Desaparecidos. Ahí están los rostros y los nombres de cientos de jóvenes, donde convergen familiares, amigos y compañeras al reencuentro con los héroes de la patria, que ofrendaron su vida para un país en libertad.

Para la defensora, manifestarse en los plantones no es costumbre, sino un derechos por la verdad, justicia, reparación y el nunca más. “Lo hago con amor, como mi responsabilidad y compromiso, como es en un lugar público, llega gente con malas intenciones que nos insultan o vigilan, pero son más las muestras de solidaridad”.

Con nuestro trabajo, nos dimos cuenta que no es de enfrentar a los adversarios, sino educar a las personas en temas de desaparición forzada y derechos humanos, concluyó Nohemí Pérez, quien además atiende a grupos de estudiantes que llegan a la sede del COFADEH para conocer más la labor institucional.