► La Embajada de los EEUU debió pedir cuentas al gobierno
► Es necesario juntar energías para enfrentar la situación de crisis política que tienen en agonía al país.
Tegucigalpa, Honduras.- “Hoy me sentí en libertad”, fueron las palabras breves palabras de Rommel Baldemar Herrera Portillo, tras encontrarse en un fraterno abrazo con la defensora de derechos humanos, Berta Oliva, al interior del centro médico psiquiátrico, donde está el joven maestro, como medida sustantiva a la prisión.
Rommel no debería estar en prisión, él es víctima de un falso operativo, afirmó Oliva, coordinadora general del Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH), tras realizar una visita a las autoridades del hospital psiquiátrico “Dr. Mario Mendoza”, en Tegucigalpa.
Venimos para cerciorarnos y saber las condiciones de Rommel, porque no es lo mismo lo que se nos pueda decir o lo que podamos imaginar que tener un adelanto sobre sobre el desarrollo de su internamiento; conocer las condiciones médicas y abrazarlo solidariamente al inicio de este año 2020.
Es así que la defensora de derechos humanos se reunió, este lunes 13 de enero, por más de 30 minutos con los doctores que atienden a Rommel, incluso desde antes de su internamiento. Justamente, fue por recomendación médica que, en octubre del 2019, el Juzgado ordenó el traslado al hospital en Tegucigalpa, tras cuatro meses en la cárcel de máxima tortura “La Tolva”, en Morocelí, El Paraíso.
Esto nos ha permite orientar un poco el tema de la defensa, reposicionar el caso de Rommel, generar conciencia y debate público, hacer incidencia, agregó Oliva.
No se puede colocar en el ámbito público, que se ha ido resolviendo casos de presos políticos, un tan solo preso político que exista en el país, que uno lo reconozca y que uno lo conoce amerita colocarlo en el debate público y que el Estado de Honduras dé respuestas sobre el por qué tiene prisioneros políticos.
Rommel: Me siento muy alegre, porque ya días las quería ver, comentó Rommel mientras le mostraba un libro a Berta Oliva, en el que ella aparece.
Es una conducta de este dictador manejar con otros calificativos a los que son presos políticos, para que no se maneje la figura como tal, sino que les aplican cargos muy alejados de las imputaciones de un prisionero político.
“Nosotros lo que hacemos es ver el momento en qué momento se dieron los requerimientos y detenciones, quiénes son los privados de libertad, y nos parece sorprendente que la mayoría de presos políticos son personas que le han apostado al fortalecimiento del Estado democrático de derechos o son personas que hacen uso de su legítima defensa, la reclamación de derechos violados y confiscados y ese es el caso de Rommel, quien en ningún momento se ocultó que acompañaba las manifestaciones convocadas por el Colegio Médico y magisteriales, para evidenciar las crisis en salud y educación. También sabemos que es muy complejo el caso en sí mismo, por se debe entender”.
También tuvo acceso a estar con Rommel, las abogadas del Área de Acceso a la Justicia del COFADEH, Karol Cárdenas y Dora Oliva, que acompañan la defensa desde el inicio de la criminalización.
El profesor de 23 años, está acusado de incendiar llantas cerca de la Embajada de los Estados Unidos en Tegucigalpa, en una manifestación convocada por la Plataforma de lucha por la Salud y Educación el 30 de mayo del 2019.
Es importante conocer el contexto
Según el análisis de Oliva, si el caso se ve alejado del contexto de ese entonces, es simple, pero la realidad es que Rommel acompañaba una manifestación convocada por una plataforma social, “y yo casi me atrevo a decir que es víctima de un falso positivo, no olvidemos que en este contexto, se hablaba mucho de las infiltraciones a lo interno de las movilizaciones”.
En ese acto no fue Rommel el que llevó las llantas, el que las bajó, ni inició el incendio. Él fue parte y lo hizo en público como lo hicieron los demás, pero lo que nos está preocupando es que la Embajada no haya orientado la responsabilidad penal al régimen o al gobierno de Honduras, porque desde que tienen vida democrática hay un convenio de proporcionar las garantías y seguridad a los países que acoge el gobierno y como se entiende entonces que no había ningún agente del Ministerio de Seguridad, ni militar ni policial y permitieron que se hiciera eso, detalló Oliva.
Digo que permitieron –continuó la defensora- porque le aseguro que cualquier persona que tuviera la intención de eso, sino era parte de la estrategia del falso positivo, no lo hubieran permitido ¿Por qué no estaba resguardada la zona? y ese acto duró más de 45 minutos aquel viernes.
Hay elementos que nos indican sin darnos cuenta de una estrategia que va más allá de lo normal, que es bien dirigida y ubica a quienes son las personas que se pueden incorporar a un acto de estos y después calificarlos de actos terroristas, hubo una acción emotiva llevada a cabo por estrategas que diseñaron esas acción para hacer caer a jóvenes como Rommel.
Cometo que la acción legal está llevando su proceso, pero no quiere que se duerma el caso, y espera que se considere el estado crítico de salud de Rommel.
Nos preocupa que quien acusa a Rommel es el Ministerio Público, y lleva sus defensa a cargo de una organización de derechos Humanos COFADEH y una defensa privada que es el abogado Omar Menjivar, ojalá los jueces cuando el caso llegue a juicio sean objetivos y valoren estos elementos y no nos gustaría que el caso se duerma y que consideren el estado crítico de salud, el sistema judicial puede asumir desde ya que si lo remiten al centro de detención donde estaba que este joven puede ser víctima de actos que se han estado realizando en el sistema penitenciario y la responsabilidad es de ellos.
Su caso no amerita enviarlo a un centro de máxima tortura, sino que se defienda en libertad mientras llega el juicio oral y público. Está pendiente la revisión de medidas, pero eso no nos preocupa por el momento.
Cabe señalar que los médicos hablaron sin ninguna presión, pero si les preocupara que Rommel presenta ansiedad que no puede a un controlar.
En el centro de atención psiquiátrica el 50 por ciento de internos son privados de libertad, y por ende está militarizado. Es la muestra que hay una sociedad enferma, hay una crisis en el sistema de salud que debe ser atendido con urgencia.
Es necesario coordinar y juntar energías para enfrentar la situación de crisis política que tienen en agonía al país. Berta Oliva, en su visita a Rommel Herrera
No es acallando voces de jóvenes o persiguiéndolos que el régimen los va a parar. La mayoría de internos psiquiátricos son jóvenes.
Estoy segura que si vamos a los diferentes centros penitenciarios encontraremos más presos políticos por que se les ha hecho los requerimientos fiscales haciéndoles creer a través de los medios de comunicación corporativos que son delincuentes y les imputan cargos para desmotivar, desmoralizar y votar el proceso de acompañamiento que les podamos dar los defensores, defensoras y organizaciones de derechos humanos.
Un joven motivado, es así como lo describe Berta Oliva. Una visita a un probado de libertad, especialmente si es sus representantes legales, le levanta el ánimo.
Nuestro reto es demostrar que Rommel no puede ir nunca más a una cárcel de máxima seguridad porque no es un hombre peligroso, es un joven que hizo uso de su derecho a la reclamaron, afirmó.
Dos razones de culpabilidad: El responsable de este hecho es el régimen hondureño por tener insatisfecho al pueblo en no dar atención necesaria en temas de salud y educación por lo que Rommel se manifestaba; y por no dar seguridad a la sede diplomática de los Estados Unidos y dejó pasar 45 minutos pese a que, a 10 minutos de distancia está una posta policial, denunció Berta Oliva, al finalizar la visita que se extendió por unas horas al preso político, Rommel Herrera Portillo.